La diputada de Teatros, Rocío Gil, confirma que mantendrá el plan previsto de nueva sede del Escalante aunque sin concretar el calendario para la licitación del proyecto
VALÈNCIA. Los teatros de la Diputació de València encaran una nueva temporada en la que, más allá de la programación, resuenan dos cuentas pendientes que marcarán la gestión del área en los próximos años. Por un lado, la rehabilitación pendiente del Teatre Principal de València, propiedad de la Diputació y cogestionado con el Institut Valencià de Cultura (IVC); por otro, la falta de sede del Escalante, que lleva desde el año 2016 operando ‘de prestado’ en distintas salas de la ciudad a la espera de una solución definitiva. Si bien los problemas son sobrevenidos, es ahora la nueva corporación quien tiene que responder ante ellos, con Rocío Gil, diputada de Teatros, a la cabeza. Fue este martes cuando la popular, junto a la directora del Escalante Marylène Albentosa, presentó al programación anual del teatro, un encuentro público –el primero de la legislatura- que sirvió para dar cuenta de esos dos puntos calientes.
“El Escalante no tiene sede desde 2016, algo que a los valencianos y al mundo de la cultura nos duele. Es algo que debemos revertir”, avanzó la diputada en su parlamento, avanzándose al turno de preguntas. Así, Gil dio cuenta del estado en el que se encuentra el proyecto. Cabe recordar que fue en 2021, un lustro después de la salida de la que fue su sede histórica, cuando finalmente se acordó la construcción de una nueva sede en un solar propiedad de la Diputació ubicado en el entorno de la Avenida de las Cortes, un proyecto para el que se invertirá alrededor de cinco millones de euros, a lo que habrá que sumar el coste del equipamiento técnico. La anterior corporación, liderada entonces por Glòria Tello (Compromís) anunció que las obras de ejecución se alargarían entre 45 y 47 meses, mientras que la licitación del concurso de proyectos del que saldrá el nuevo Escalante llegaría en el primer trimestre de 2023.
Estos plazos, sin embargo, no se han cumplido. Tal y como avanzó este diario, la licitación sigue sin publicarse, con lo que la ejecución de su sede definitiva sigue alargándose en el tiempo. En este sentido, si bien Gil apuntó que su intención es “adelantarlo lo máximo posible”, preguntada por los plazos afirmó que estaba en un estado “embrionario” y no concretó cuándo se publicará la licitación. De igual forma, señaló que la publicación de los pliegos están pendientes de “matizar algunos aspectos jurídicos” y que “depende de Contratación”. Parece que se mantendrá, en cualquier caso, el plan iniciado durante la pasada legislatura sin cambios y sí se ejecutará el nuevo teatro en el solar anunciado.
Otra cuestión que marcará la legislatura es la situación del Teatre Principal por una doble vía. Por un lado, está la cuestión de la convivencia interinstitucional, pues aunque dependiente de la Diputació se cogestiona con el IVC. En este sentido, fuentes de la institución cultural, confirman que el encaje de ambas programaciones no siempre ha sido sencillo, una presencia cada vez mayor de la corporación provincial que es uno de los puntos que está sobre la mesa de sus nuevos gestores. En este sentido, Gil desveló una reciente conversación con el Director General de Cultura, Sergio Arlandis, con el objetivo de “mejorar” este encaje. “Tenemos que convivir en todos los sentidos […] Para que la gente vea el Principal, con entidad propia, que no sea a la derecha una programación y a la izquierda otra”, apuntó la diputada.
En esta convivencia tiene que ver la parte intelectual y, también, la física, pues tras acometer una rehabilitación de su fachada, el Teatre Principal está pendiente de una gran actuación por cuestiones de seguridad. Así lo refleja el plan director que, según fuentes consultadas por este diario, refleja que hay que desarrollar una primera fase de actuaciones, como el sentido de apertura de puertas para adaptarlas a las normativas de seguridad, que se harían si necesidad de suspender la programación, y otras que ya serían a puerta cerrada y durante, al menos, un año.
Si bien estaba previsto que en esta legislatura el Principal tuviera que permanecer cerrado durante un extenso periodo de tiempo, Rocío Gil confirmó que la corporación trabaja en una rehabilitación “por fases” que aprovechará los meses de menos actividad para llevar a cabo las distintas actuaciones previstas. “Consideramos que cerrar todo el tiempo que dice ese plan director sería privar demasiado tiempo de cultura. Ese plan director se puede hacer por fases [...] No cerramos mañana y ya veremos cuando abrimos dentro de tres años. Eso no va a ocurrir. Vamos a acometer todas las obras necesarias pero por fases parar cerrar el tiempo mínimo".
Si bien el continente es un punto caliente constante en la historia reciente del Escalante, también es clave el contenido. En este sentido, la diputada hizo un guiño a la anterior corporación, de quien ha dependido el diseño de la programación. “La cultura es cultura, hay que seguir con la programación que estaba prevista”. En este curso, el Escalante subirá al escenario a 41 compañías, más de la mitad de ellas valencianas y cinco internacionales con propuestas de gran y pequeño formato. Entre ellas, las producciones propias que se estrenan este año: Peter&Pan, con LaMaR, que presenta a un Peter que se ha olvidado de su pasado; L’home que cremava pedres, con la compañía de Tian Gombau, que relata la relación de un hijo y un padre absorto por el trabajo; Boira, con MaQuinant Teatre; Princeses, cavallers i dracs, con Bramant Teatre; y la reposición de Xafar la gespa, junto a la Negra; y La màquina de Rube Goldberg, junto a Nacho Diago Producciones en la Luna, en gira.
El Escalante refuerza la propuesta de obras dirigidas a la primera infancia (de 0 a 5 años) y propone para los próximos meses Univers, de la compañía Engruna Teatre; La barca, de La Larväria; y Sotabosc, la vida sota els arbres, de Inspira Teatre. Además, el ciclo ‘Menut Teatre’ incluirá Miedo come todo… Sueños al vuelo, de la compañía mejicana Flores Teatro Danza; Crassh Babies 2.0, de la portuguesa We Tum Tum; y Textures, de La curiosa.
Para niños y niñas de 6 a 12 años, el teatro pondrá en escena Peter&Pan, de LaMaR y Escalante; Xafar la gespa, de La Negra y Escalante; El món està trencat però es pot caminar, de Albena Teatre, Tantakka Teatroa y Contraproduccions; Full House, de Eléctrico 28; Cucú, de Bambalina Teatre Practicable; L’home que cremava pedres, de la compañía de Tian Gombau y Escalante; Lù, de Maduixa; Merrick. El musical, de L’últim toc teatre; De tu a tu, del Col·lectiu Mur; An-Ki, de Ortiga; Los Pfeiffer, de La Troupe Malabó; Cube, de JM Gestión Teatral; Entrañas, de El Patio Teatro; Boira, de MaQuinant Teatre y Escalante; Imperfect, de la Companyia de Comediants La Baldufa; y POI, de d’Es Tro.
Dentro del ciclo ‘Nadal a l’Escalante’, dirigido también al alumnado de Primaria y sus familias, se podrá disfrutar de Ambulant, de La Fam Produccions; y de N’imPORTE quoi, de Leandre Clown. El público juvenil también encontrará obras como After·Sun, de la compañía Triangle Teatre; Don Ramón María del Valle-Inclán, de Bravo Teatro; La posibilidad de la ternura, de Teatro La Re-Sentida de Chile; Bruno, el musical que ho va canviar tot, de Off Artes Escénicas; Hamlet, una versión recontra libre, de la compañía chilena Teatro La Plaza; Los que comen tierra, de La Zafirina; La plaça del Diamant, del Teatre Nacional de Catalunya; La dona més lletja del món, de La Penúltima Teatre y Dacsa Produccions; Moby Dick, de la compañía francesa y noruega Plexus Polaire; y Princeses, cavallers i dracs, de Escalante junto a Bramant Teatre.
Finalmente, el público adulto podrá reflexionar de forma colectiva con el ciclo ‘Teatre de la Memòria’, que esta edición pondrá en escena Perpetuum Mobile, de Merce Tienda; Plany en la mort d’Enric Ribera, de Carme Teatre; y El verdugo, de Espejo Negro, que recupera el texto de Luis García Berlanga y Rafael Azcona. En cuanto a la Gira Escalante, este año La màquina de Rube Goldberg, la primera producción de ilusionismo de Escalante junto a Nacho Diago Producciones en la Luna, hará parada en Albaida, Canals, Sueca, Ontinyent, Burjassot, Puçol y Paterna. Como novedad, otras obras de pequeño formato que recorrerán municipios valencianos también con Escalante son Boreal y Plàstic, de La familia política; y Baktana de Lazuz.