VALÈNCIA. La Diputació de València iniciará este verano, previsiblemente la primera quincena de agosto, la primera fase de las obras de mejora de la seguridad de la CV-339, la carretera que conecta Llíria con Alcublas. Concretamente, la intervención será desde el acceso de la autovía CV-35 hasta la CV-245, vías de titularidad autonómica.
En el caso de la CV-339, de titularidad provincial, el área de Carreteras que dirige Rafa García tiene prevista una inversión cercana a los 10 millones de euros para acondicionar un trayecto de 13,3 kilómetros, a través de un proyecto dividido en cuatro fases.
La primera de estas fases, con una longitud de 3,2 kilómetros, se ha presentado este martes en Llíria. Este proyecto ha sido adjudicado a Ferrovial Construcciones S.A. por un importe cercano a los dos millones de euros, y su plazo de ejecución es de ocho meses.
Los trabajos consistirán en ampliar de 7 a 9,5 metros la plataforma y habilitar un carril bici de tres metros por ambos lados de la calzada en el primer kilómetro, hasta la cooperativa, conectando así el recorrido ciclista con el que transcurre junto a la autovía CV-35.
Del mismo modo, también se remodelarán las intersecciones con los caminos de la Iessa y Caicons en este tramo de 3,2 kilómetros, entre el acceso desde la autovía hasta el camino del Bayo.
En palabras del alcalde de Llíria, Manolo Civera, la CV-339 " es un un eje viario de gran actividad económica en nuestra población, por la presencia a su alrededor de la cooperativa y las infraestructuras de las comunidades de regantes, por lo que esta inversión servirá para mejorar la seguridad vial de los usuarios de la carretera, entre ellos los de distintas urbanizaciones de Llíria, y facilitará el uso de medios no contaminantes a través del tramo ciclopeatonal".
Civera se ha mostrado, así satisfecho por la ejecución de unas obras que constituyen una "reivindicación histórica de la población", por ser esta una vía "muy transitada por agricultores, ciclistas y moteros, que conecta nuestra comarca con La Serranía". Por su parte, el diputado de Carreteras, Rafa García, también ha coincidido en la importancia de la intervención.
La CV-339 pertenece a la red provincial de carreteras y la Diputación ya acondicionó el tramo final de la misma, de aproximadamente un kilómetro. Los 13,4 kilómetros restantes presentan una sección transversal insuficiente, una calzada de 7 metros de anchura sin arcenes y un pavimento agotado.
