VALÈNCIA (EP). La Fiscalía va a pedir al médico forense que determine si el fallo del desfibrilador en la Ciudad de la Justicia de València pudo afectar o tener algún tipo de consecuencia en la muerte del hombre con el que se intentó utilizar después de que éste sufriera una parada cardiorespiratoria cuando iba a ser juzgado por un delito de tráfico de drogas.
El objetivo es que este informe determine si el desfibrilador pudo o no salvar la vida a la víctima. De esta forma podrá conocerse si hubo algún tipo de imprudencia y, así, exigir responsabilidades, según ha podido saber Europa Press. El Juzgado de Instrucción número 3 de València es el órgano que se hizo cargo del levantamiento de cadáver.
Por su parte, la Dirección General de Justicia también abrió una investigación tras conocer el fallecimiento del hombre para saber qué ocurrió con el desfibrilador. Precisamente mañana ha convocado una reunión con el objetivo de trasladar a todos los agentes del sector --Decanato de los juzgados, sindicatos, Fiscalía-- la información recabada hasta el momento.
El fallecido es un hombre de 54 años que sufrió el pasado jueves una parada cardiorespiratoria en la Ciudad de la Justicia de València cuando iba a ser juzgado por tráfico de drogas. Le dio una indisposición en el momento en el que su abogado estaba negociando con las acusaciones una rebaja de la pena.
El incidente se registró en la sección primera de la Audiencia Provincial de Valencia, donde estaba previsto que se celebrase un juicio contra 14 personas por delitos contra la salud pública. Momentos antes de comenzar, acusaciones y defensas llegaron a un acuerdo y, cuando se estaba preparando el acta que lo certificase, uno de los acusados sufrió una indisposición.
Mientras este acusado estaba siendo atendido por sanitarios, el presidente del tribunal preguntó a las partes si querían seguir con la celebración del juicio para dejar plasmada la conformidad. Así, la vista prosiguió con las otras 13 personas.
El hombre fue atendido inicialmente en el Instituto de Medicina Legal, lugar al que acudió por su propio pie por una crisis de ansiedad, y donde se le suministró un medicamento.
Seguidamente regresó al juicio y una vez allí, se desplomó. Se da la circunstancia de que en ese momento se estaba celebrando en la Ciudad de la Justicia un congreso de médicos de urgencias, con lo que varios facultativos acudieron e intentaron reanimarle. También se presentaron en el lugar médicos del IML.
Tras ello, a los minutos llegó una unidad del Servicio de Ayuda Médico Urgente (SAMU), cuyo equipo médico realizó la reanimación cardiopulmonar durante alrededor de 45 minutos, así como otras maniobras como la intubación. Pero ya no hubo respuesta.