La Generalitat marca a los coches de Cabify en la Comunitat y los taxistas lo aplauden

VALENCIA.  Los coches de Cabify en la Comunitat Valenciana serán reconocibles a simple vista. ¿El motivo? La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha creado un distintivo para identificar los vehículos de alquiler con conductor en la Comunitat Valenciana, fórmula utilizada por la compañía tecnológica para crear este servicio de recogida sin tener que emplear taxistas. El objetivo es facilitar a los servicios de inspección del transporte, policías locales y otros miembros de seguridad el reconocimiento en cualquier momento de que el turismo en cuestión cumple la normativa a la que están sujetos.

Cabify realiza contratos mercantiles con empresas de chóferes de la zona para emplear a sus trabajadores en los momentos que están parados y que operan con licencias de este tipo. La Conselleria ha dado trámite de audiencia sobre el proyecto de orden a todas las organizaciones y asociaciones legalmente constituidas para que puedan presentar cuantas alegaciones consideren oportunas.

La entrega del distintivo se realizará una vez comprobado que cumplen todos los requisitos legales establecidos para el ejercicio de esta actividad y deberán colocarse en la parte superior derecha de la luna delantera para ser visibles desde el exterior sin interferir en la visibilidad. La nueva normativa ha sido bien acogida tanto por las organizaciones representativas del sector del taxi. ¿Por qué? 

"Que no esperen en las calles"

“Principalmente que sepamos donde hay un VTC y qué vehículos son”, explica Ismael Arráez, presidente de la Asociación Gremial Provincial de Auto Taxis de Valencia. Principalmente, la intención es detectar dos ilegalidades. Que la gente sepa si le están enviando un coche sin licencia con el fin de que operen con legalidad y, la más importante, detectar si incumplen la normativa de estar en su base. “Que estén en su garaje y no esperando a ver si les piden servicio en zona de fiesta, algo que no pueden hacer legalmente”, destaca.

Es cierto que los VTC no tienen permitido estacionar a la espera de clientes, sino que tienen que ser solicitados, prohibición que fue regulada en uno de los cambios de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres y que Competencia instó al Gobierno estatal a eliminar para aumentar la libre competencia. Esto perjudica a la compañía tecnológica al aumentar los tiempos de espera por tener que desplazarse el coche desde la base a una zona concreta.

Sin embargo, según apunta Cabify, los clientes de las empresas con conductores VTC son ellos mismos, por lo que pueden solicitar sus servicios y pedir que esperen en las calles que deseen, ya que el cliente de estas empresas no es el usuario final.

Y es que los coches de Cabify, a pesar de prestar un servicio de recogida similar al del taxi, La Generalitat pide estas distinciones en base al Real Decreto 1211/1990, de 28 de septiembre, por el que se aprueba el Reglamento de Ordenación de los Transportes Terrestres, que en su artículo 182 apartado cuatro, permite a las comunidades autónomas que, por delegación del Estado, hubieran asumido competencias en materia de autorizaciones de arrendamiento de vehículos con conductor, exigir que los vehículos amparados en autorizaciones de esta clase se identifiquen externamente mediante algún distintivo.

“Cabify se suma a la adopción de esta nueva normativa en la Comunitat Valenciana, ofreciendo su colaboración con el objetivo de facilitar el trabajo a los servicios de inspección de transporte y a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado”, apunta la compañía. “Desde sus inicios, Cabify opera dentro del marco de la normativa vigente cumpliendo con todos los requisitos legales y ofreciendo siempre su colaboración con las respectivas autoridades”.

Las viviendas turísticas, también identificadas

Las viviendas turísticas, según explicó Turismo a Valencia Plaza, también tendrán placas distintivas de la Agència Valenciana de Turismo con el fin de que el usuario pueda identificar que están registradas y son legales. Esta es una de las medidas que se tomarán dentro de la nueva normativa de distintivos turísticos registrados que, por primera vez, incluirá estas placas específicas para viviendas turísticas y plazas de apartamentos como ya tienen los hoteles o los campings. 

Sin embargo, a la Asociación de Viviendas de Alquiler para Estancias Cortas de Valencia no le ha gustado demasiado. "Que haya una placa en mi puerta cuando ya está registrada es  como hacer un doble registro", apunta Alfonso Cantador, su presidente. "Lo veo como un doble control que incluso puede crear malestar entre los vecinos. Es una forma de señalarte”, explicaba Alfonso Cantador, presidente de Avaec.

Competencia quiere dar más libertad al modelo de Cabify

El ministerio realizó una modificación de la  Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres que afecta al arrendamiento de vehículos de alquiler con conductor que utilizan los chóferes. En concreto, la norma establece una limitación de una autorización de arrendamiento con conductor por cada treinta autorizaciones de taxi, sin perjuicio de que aquellas comunidades autónomas que, por delegación del Estado, hayan asumido competencias en materia de autorizaciones de arrendamiento de vehículos con conductor puedan modificar esta regla siempre que la que apliquen sea menos restrictiva. 

Esta normativa respalda la decisión que tomó la Conselleria de Infraestructuras de denegar este tipo de autorizaciones por la avalancha de peticiones que recibió a finales de 2015. "Esta normativa proporciona a la Generalitat mayor seguridad jurídica al regular este tipo de autorizaciones y, por tanto, permite seguir el modelo que se ha aplicado en los últimos meses siguiendo la normativa", aseguraban desde Infraestructuras.

Para Competencia deberían eliminarse los límites cuantitativos. El Real Decreto permite que la Administración Pública deniegue autorizaciones de VTC cuando, a su criterio, existe un desequilibrio entre la oferta y la demanda. Esta negativa será automática cuando exista más de una autorización de VTC por cada treinta licencias de taxi. "Dicha  restricción limita de forma sustancial la entrada en el mercado de transporte urbano de viajeros e impide que los taxis y los VTC compitan entre sí y que los consumidores puedan beneficiarse de una mayor disponibilidad de vehículos, un menor tiempo de espera, y una mayor competencia en precios, calidad e innovación", asegura la CNMC.