VALÈNCIA (X. A./ AGENCIAS). La Abogacía de la Generalitat expuso este miércoles su informe en el juicio de la pieza principal del caso Emarsa señalando en diferentes mapas hasta 21 cajeros donde, según la acusación, el exvicepresidente de la Diputación, Enrique Crespo, y el exgerente de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), José Juan Morenilla, habrían realizado 230 extracciones de dinero público desviado entre 2008 y 2009.
La localización de los cajeros, como revelan los gráficos adjuntados, se encontrarían en el caso de Crespo próximos a su vivienda, su trabajo y el colegio de sus hijos; acumulando un centenar de extracciones. En el caso de Morenilla, se contabilizan 81 visitas a cajeros cerca de su empleo y 46 en las inmediaciones de su domicilio en Meliana, siendo la sede situada en la Plaza Mayor la 'estrella' de sus extracciones, con 39 en apenas seis meses.
De esta manera la acusación, que solicita penas similares a las de la Fiscalía, desgranó cómo Crespo y Morenilla fueron haciendo diferente extracciones de dinero con dos tarjetas que les había proporcionado el empresa Jorge Ignacio Roca, también investigado, a nombre de algunas mercantiles con las que se habría producido el fraude. En esas cuentas, había supuestamente dinero desviado de la depuradora de Pinedo.
En concreto, el informe de la Abogacía de la Generalitat detalla sobre Crespo que utilizó dos tarjetas bancarias proporcionadas por Roca para hacer 66 extracciones de dinero en cajeros próximos a su lugar de trabajo y su domicilio de Manises entre los años 2008 y 2009. Así mismo, aporta 12 extracciones en un cajero cercano a la sede de Emshi; y otras 22 en cajeros cercanos al colegio y domicilio familiar de sus hijos en días de visita. En cuanto a Morenilla, le atribuyen un total 130 extracciones, la mayoría de ellas en 2008.
Para Enrique Crespo solicita una pena de 20 años de prisión por un delito continuado de prevaricación administrativa y otro de falsedad en concurso con un delito continuado de malversación en la sede de la Epsar; y los mismos delitos pero en la sede de Emarsa. Mientras que para Morenilla reclama 10 años de prisión por los mismos delitos pero únicamente cometidos en Epsar.
La Generalitat considera que han existido dos tramas delictivas. La primera, la relacionada con la gestión de lodos, donde "claramente" resulta "necesaria" la participación de varias personas, que debían actuar coordinadamente, para que se pudiera producir la malversación.
Y la segunda, la relacionada con acciones fundamentalmente del exgerente de Emarsa Esteban Cuesta y del ex director financiero Enrique Arnal a través de la contratación de empresas de sus allegados con objeto de obtener un beneficio ilícito y la contratación de personas allegadas o afines políticamente, contaban con el "beneplácito" de Crespo.
Además, estima que estos acusados realizaron gastos indebidos que cargaron ilícitamente a Emarsa, ya que se trataba de gastos personales. "Aquí es evidente que nos encontramos ante un plan individual de los acusados, sin que aparezca un previo concierto entre ellos, y mucho menos un concierto con los acusados relacionados con la gestión de lodos. Por tanto, es una unidad de acción diferente de la referente a la gestión de los lodos", apostilla.