Font Salem, Panamar y Cárnicas Serrano destacan que el sector lleva años trabajando en planes para reducir grasa, azúcar y sal en los productos alimentarios
VALÈNCIA. Los empresarios valencianos del sector de la alimentación rechazan la creación de impuestos para gravar a los productos con elevados porcentajes de grasas o azúcar, tal y como plantea Compromís y urgen a las Administraciones Públicas y los partidos a tomar medidas para mejorar los hábitos alimenticios de los consumidores.
Así lo han manifestado representantes de firmas alimentarias valencianas como Panamar, Font Salem o Cárnicas Serrano en una jornada del Seminario de Ética Económica y Empresarial de la Fundación Étnor Los Objetivos de Desarrollo Sostenible como oportunidad de negocio y exigencia de justicia, moderada por Javier Quiles, director de Relaciones Externas de Consum.
Las empresas destacaron que llevan años trabajando en reducir sal, azúcar y grasas en los alimentos para mejorar la salud del consumidor, por lo que no comparten la creación de impuestos para "criminalizar" a determinados productos.
"No se puede mejorar una empresa o un sector como el alimentario a costa de nuevos impuestos. Son solo medidas recaudatorias", afirma Isabel Martínez, directora general de Panamar durante la mesa redonda Salud y Bienestar en la empresa” que ha compartido con Antoni Folguera, director general de Font Salem, y Carlos Serrano, director general de Cárnicas Serrano. Los tres representantes de la industria alimentaria han participado
En la misma línea, Antoni Folguera apunta que cuando los políticos "se quieren meter en la generación de valor algo falla. Se está criminalizando al sector de las bebidas con el tema de los azúcares. Hay mucha publicidad negativa y se ataca a las empresas con medidas recaudatorias".
"Desde el sector nos estamos preocupando por poner en valor las propiedades de los productos para que el consumidor las conozca. Hemos firmado un acuerdo para los próximos años para reducir la sal, la grasa o el azúcar en nuestros productos. Hay que formar más a las personas antes que poner medidas impositivas que perjudican a las empresas", afirma Carlos Serrano.
En este sentido, los empresarios han coincidido en el compromiso voluntario de todas las asociaciones para mejorar en esta línea porque lo demanda la sociedad, no los políticos. Por ello, en colaboración con organizaciones como la Organización Mundial de la Salud o la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición están trabajando en planes concretos y medibles para reducir la sal, la grasa o el azúcar de los alimentos.
Según ha informado la fundación en un comunicado, los representantes de la industria alimentaria han destacado que es el consumidor el que elige el producto que triunfa en el mercado y cada vez hay una mayor preocupación por la salud. "Estamos en constante desarrollo de productos alternativos que satisfagan al consumidor que cada vez demanda más productos naturales, sin ningún aditivo, y con una funcionalidad para la salud", apunta el director general de Font Salem.
Para Carlos Serrano, "la salud es una oportunidad de negocio para nuestro sector que tiene que estar constantemente innovando para dar respuesta al consumidor y diferenciarse de sus competidores para que el cliente elija su producto". En este sentido, Isabel Martínez apunta que es importante "comunicar lo que está haciendo la empresa, ser transparente y transmitir a la sociedad el compromiso ético para mejorar el negocio".
Durante la mesa redonda, los empresarios han reclamado a los políticos un gran pacto educativo para mejorar la formación a las necesidades que demanda la industria. "Las empresas precisamos de un trabajador más formado y especializado, hay puestos con un déficit de mano de obra que no encontramos y a las personas tenemos que formarlas desde la empresa", explica Antoni Folguera, quién apunta a "una falta de valentía de la clase política para un pacto educativo sin pensar en periodos electorales".
Por su parte, Carlos Serrano reclama ante el problema de la obesidad infantil que “en vez de echar toda la culpa a la alimentación, los políticos sean conscientes que la mejor manera de reducir la obesidad infantil es fomentar más asignaturas como educación física para que los niños adquieran hábitos de vida saludable”.
El presidente de la Fundación Étnor, Enrique Belenguer, y la directora de la Fundación Étnor y catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universitat de València, Adela Cortina, han sido los encargados de inaugurar el acto.