Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La internalización del servicio de farmacia sociosanitaria en las residencias públicas ahorrará más de 500.000 euros anuales. Así lo recoge la memoria económica del decreto que regula la subrogación del personal y que, a día de hoy, forma parte de Quavitae Servicios Asistenciales SAU. Esta compañía es la encargada de controlar los servicios de farmacia en cuatro residencias públicas en un contrato que lleva caducado desde 2014.
Esta privatización del área empezó en el año 2000, con un contrato a la compañía Sades SL. En 2003 pasó a manos de Enken Servicios de Prevención SL, seguido de Mapfre Servicio de Prevención SL y finalmente Quavitae, que pasó a formar parte de Domus VI tras absorberla. Fue en 2014 cuando terminó el periodo que enmarcaba el último concurso y, desde entonces, se paga a la compañía por enriquecimiento injusto. Un total de 227.359,39 euros cada mes, lo que supone un gasto anual de 2,73 millones de euros anuales.
Éste importe incluye el gasto de personal, el transporte de medicamentos a las residencias y desplazamientos de los farmacéuticos a las residencias junto al mantenimiento de las envasadoras, limpieza en "La Florida", destrucción de papel, eliminación de residuos sanitarios, mantenimiento de fax y fotocopiadoras y suministro de material en la oficina.
Ahora, la gestión directa de este área en los centros sociosanitarios de 'Borriana' en Borriana (Castelló), 'El Pinar’ (Castelló), 'La Cañada’ en Paterna (València) y ‘La Florida’ (Alacant); ahorrará un total de 502.940 euros anuales tras la subrogación de un total de 55 trabajadores. Este gasto se rebajará hasta los 2,2 millones de euros anuales que se enmarcarán en prácticamente su totalidad en la Conselleria de Sanidad y de los que 44.000 saldrán de las arcas de la Conselleria de Igualdad para la limpieza de La Florida.
Según la Conselleria de Sanidad, la vuelta del servicio sistema público -que se acometerá en el mes de julio- permitirá uniformizar el modelo de prestación farmacéutica en los centros públicos y la mejor coordinación asistencial con el sistema sanitario. Éste fue uno de los objetivos marcados en el Seminari d'Hivern, celebrado en Altea, y donde se especificaba la subrogación del servicio después de casi una década prestado fuera de contrato.
Sanidad esperaba ejecutar la vuelta a la gestión pública del servicio en el primer semestre del año tras la subrogación del personal de resonancias y parece que, por lo pronto, está en disposición de cumplir plazos. Esto supondrá la incorporación a la administración de medio centenar de trabajadores, la mayoría farmacéuticos y técnicos de farmacia; y que se incorporarán a los departamentos de salud que les correspondan.
