La Internet Moon Gallery instala su espacio físico en València

VALÈNCIA. Hasta las ideas más inmensas necesitan a veces un punto en contacto con la tierra. Este es el caso actual de la Internet Moon Gallery, una galería de arte digital creada por Manu Minch en el año 2016 que ahora por fin aterriza en València. Lo hace con un espacio “satélite” ubicado en la calle Dr. Pere Feliu 7, en Luna. Un lugar en el que trabajar de forma paralela con la red para seguir promulgando los mensajes del arte: “Ambos proyectos crecen de forma paralela. El espacio físico surge como una necesidad propia respondiendo a mi proceso artístico natural, que ahora comprende tanto lo intangible como lo material”. Dos formas de ver el arte que no están reñidas por el comisario y artista, quien asume y se adapta a los cambios que le pide su avance personal.

El proceso del artista responde a la necesidad de cambiar de espacios y tono, un pensamiento que surge después de la pandemia. En el período de confinamiento, y de forma reivindicativa, la galería alojada en Internet paralizaba su producción. Minch veía el mundo parado en este momento y sentía como extraño seguir trabajando con los artistas y obligarlos a producir: “Cuando llega la pandemia yo me quiero alejar de la idea de la exigencia a los artistas en este momento de confinamiento”. Esta propuesta se dirige ade forma indirecta a las instituciones, que comenzaron a aprovecharse de una salida que antes criticaban: “Comenzaron a hacerlo porque no les quedaba otra alternativa”, sentencia Minch.

Al igual que las galerías pegan un salto hacia el futuro que Minch ya había descubierto el artista se acerca a un tipo de trabajo más clásico, aunque sin perder la línea. Para ello contacta con Daniel Dobarco, un artista valenciano cuya visión del mundo versa sobre el mundo de lo virtual y de los videojuegos. Ambos encuentran un enlace fuerte en lo virtual y lo digital, según Dobarco desde “lo personal y lo que nos rodea”, que se traduce en un recorrido que conecta con lo virtual en la tierra, en Luna: “Lo digital se convierte, es el punto que nos ata conjuntamente”. Minch a su vez cedió al artista el espacio para generar la obra con cartones y otro tipo de elementos, que se disponen a lo largo de la sala entre ventanas y techos.

La obra de este artista es Lore, un acercamiento a través de situaciones del día a día junto a los videojuegos. Un mundo al que Dobarco suele escapar dentro del concepto del rol, que traslada dentro de Luna: “El personaje que se rodea en esta exposición soy yo en el calabozo, lo traduzco como una cuestión vital. Al final te metes ahí por cuestión personal y siempre en búsqueda de un tesoro”. En esa búsqueda a su vez el espacio está plagado por pequeños orcos, que ya estaban ahí mucho antes: “Muchas veces llegamos a este tipo de situaciones creyéndonos los héroes, cuando en realidad somos sus invasores. Es uno de los retos de la vida que me planteo”.

De momento Lore se puede “rolear” o “jugar” en Luna desde el pasado 15 de mayo, ecuando en el cielo brillaba una luna llena, marcando el inicio de la exposición. Este peculiar timing de trabajo es el que sigue Minch desde hace más de 6 años, inaugurando según el cielo una exposición nueva: “Es un concepto para vincularme con los tiempos naturales, cada 29 o 30 días me obligo a conformar una especie de calendario visual de esta manera. Al mirar al cielo cualquiera puede saber cuánto queda para la siguiente exposición”. Para jugar con Dobarco cualquiera puede acercarse a Luna hasta el 26 de junio, y esperar a la próxima luna llena para ver que nos acerca Minch de nuevo. Pero tranquilidad, todas las personas que no orbiten en València podrán seguir disfrutando de un cielo eterno en la web, irónicamente en una nube eterna que lo aloja todo, llamada Internet Moon Gallery.