La Generalitat anuncia medidas para conocer con certeza los planes de la empresa, que no le ha notificado que quiere cerrar
VALENCIA. El futuro de Valenciana de Protección Ambiental (Vapsa), una planta de reciclaje perteneciente al grupo ACS, se ha convertido en un auténtico misterio en la localidad de l'Alcudia de Crespins, donde está radicada la compañía.
Preguntadas al respecto, ninguna de las fuentes oficiales del grupo ACS consultadas por este diario ofrecen detalles sobre sus planes para la planta. En Madrid manifiestan que no están autorizados para informar sobre la mercantil y redirigen las preguntas a la filial Urbaser, de la que pende Vapsa en última instancia. Pero Valencia Plaza tampoco ha obtenido respuestas al consultar a esta sociedad. Tampoco aclaran nada por teléfono en la propia planta de reciclaje.
La noticia, sin embargo, ha sembrado la inquietud tanto en la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente como en el consistorio de la localidad, quienes tampoco disponen de información sobre los planes de la empresa. "Desconocemos los motivos por los que se están planteando la disolución, al ayuntamiento no le han notificado nada", lamenta el alcalde del municipio, Roberto Granero.
En la administración autonómica tampoco salen de su asombro. Subrayan que se trata de una firma en activo sobre la que no tienen constancia de ningún tipo de incidencia, y agregan que la Generalitat va a tomar medidas para conocer con certeza los planes futuros de la empresa.