VALENCIA. La patronal de la provincia de Alicante, en preconcurso de acreedores por una deuda de 3,8 millones de euros con el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), ha encargado un plan estratégico para mejorar su reputación que, entre otras cuestiones, le recomienda que esconda a su presidente, Moisés Jiménez. El motivo es que su imagen se percibe como "vinculada al PP", algo que perjudica a la patronal a la hora de negociar con la administración la solución a sus problemas.
El informe, entregado este mes de noviembre a la patronal por la firma Intermundo Comunicación, refleja que Coepa siempre ha tenido una imagen de una entidad "muy presidencialista" y una proximidad "más allá de lo recomendable o natural con el partido que ha gobernado la Comunidad los últimos veinte años". "Tras un cambio de poder, los interlocutores que antes podían ser válidos no son reconocidos por los actuales gobernantes", justifica.
Esa vinculación reportó acuerdos y convenios "muy buenos" para la patronal, pero con la imagen de que los obtuvo por "amiguismos". Con el Consell del PSPV y Compromís "la situación de Coepa se complica" porque quienes se comprometieron a pagar a Coepa "se marchan sin zanjar las cuestiones planteadas de forma conjunta". Ante ello, el análisis considera que los ataques de la patronal al nuevo Consell no ayudan.
El documento constata un distanciamiento con la nueva administración por los "ataques" del presidente de Coepa y sus trabajadores con declaraciones públicas contra quien "puede sentarse a intentar llegar a una solución".
Por ello, entre las acciones de comunicación que propone para mejorar su imagen, están la realización de entrevistas en radio y televisión para destacar la gravedad de una eventual quiebra de la patronal, pero sin su presidente. "Se recomienda que en estas entrevistas o tertulias no participe el presidente, sino otros miembros de Coepa", propone.
También aconseja que el vicepresidente de Coepa, Paco Gómez, le remita una carta "calmada, de consenso y con propuestas concretas y de un tono conciliador" a Ximo Puig o una ronda de contactos políticos de la junta directiva y no solo con el presidente por ser "más efectivas".
Respecto a la tormentosa relación con el presidente de Cepyme Alicante, Cristóbal Navarro, el informe asume que es una "piedra en el zapato" para el futuro de Coepa. A la vista de que hay una "vinculación de imagen Coepa-Jiménez-PP", Navarro se posiciona "de manera manifiesta" con el PSPV y Compromís, "De ahí se podría explicar la representatividad que le ha dado Rafa Climent a Cepyme en el Observatorio del Comercio, excluyendo a Coepa", detalla.
Además, urge a "convencer" a los sindicatos de la provincia de la "oportunidad laboral" que se pierde con el Centro de Oficios y, entre las propuestas más sorprendentes, se encuentra el envío de anónimos a medios de comunicación tratando "la baja representatividad de Cepyme y que sólo hay que entrar en la página web para ver a quién representa".
El estudio también lamenta que, a partir del análisis de algunas noticias, se observe que no hay "apoyo explícito de otras organizaciones empresariales a Coepa", entre las que cita a la autonómica Cierval o al lobby AVE. "la actitud de Coepa ha sido pedir a Cierval que le ayude y no se ponga de perfil ante los hechos y también le ha advertido de su responsabilidad en un posible embargo", añade.
En la busqueda de apoyos ajenos a la organización, el informe recomienda crear un frente común para defender los intereses de la provincia de Alicante. Para ello, propone un plan de acción en el que, entre otras cosas, recomienda al presidente escenificar un amago de dimisión ante la directiva de la patronal o una campaña de publicidad en medios con el lema "Coepa somos todos" y en redes con el mismo hashtag.
También insta a buscar "una foto" con Cierval que transmita unidad, que la CEOE envíe una nota de prensa de apoyo a la patronal alicantina, que la valenciana CEV le de su soporte con un artículo de opinión o que AVE saque una nota de prensa sobre "la importancia del empresariado alicantino".
En el plan de comunicación, se sugiere también contactar con una entidad bancaria para que difunda un comunicado "sobre la gravedad de que una patronal desaparezca". El objetivo, dice, es conseguir "ser escuchados por los políticos, logrando que se aporten soluciones viables al problema".
Por otro lado, los empleados de Coepa trasladaron este lunes al alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, que llevan más de cinco meses sin cobrar sus nóminas y consideran que los responsables de la situación son la propia patronal, así como la Generalitat y el ayuntamiento.
Según un comunicado municipal, el ayuntamiento indicó que el encuentro se produjo en un contexto en el que los empleos de Coepa "están en peligro debido al delicado estado económico en el que se encuentra la confederación empresarial".
La nota señala que los trabajadores trasladaron a Echávarri su "angustiosa situación" ya que llevan más de 5 meses sin cobrar sus nóminas, y apuntaron como responsables del momento que atraviesa Coepa a la propia patronal, el Consell y el ayuntamiento "a partes iguales". Además, expresaron su disgusto por que el alcalde calificara de "estructura moribunda" a la confederación empresarial.