VALÈNCIA (EP). El Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i) ha restaurado la conocida inicialmente como 'Virgen de la Almoyna' del Maestro de Perea, que ha pasado ahora a llamarse 'Virgen del Gremio de los Molineros' porque en el proceso de restauración han recuperado el 80 por ciento de la pintura que estaba oculta y las imágenes que han salido a la superficie han aportado nueva información sobre el cuadro.
La pieza, que se expone desde este mismo miércoles y hasta finales de marzo en el Museo de Bellas Artes de València, fue adquirida por la Generalitat por solo 9.000 euros en una subasta, fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y, tras un trabajo de "limpieza", desveló su aspecto original, del siglo XV, que se ocultaba bajo una nueva imagen, "tuneada" en el siglo XVIII por quienes consideraron entonces que esta obra había "pasado de moda".
Así lo han explicado este miércoles la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga; la subdirectora del IVCR+i, Gemma Contreras y el director del Museo de Bellas Artes de València, Carlos Reyero, que han presentado la tabla de la 'Virgen del Gremio de los Molineros'. Para conocer con detalle el proceso de restauración, la pieza se acompaña de un panel explicativo y un audiovisual que refleja el trabajo realizado.
La "limpieza" de la pieza consistió en "eliminar todo el repinte" del siglo XVIII y hasta siete capas de dorado colocadas encima de la obra original. Entre las nuevas figuras que se muestran en el cuadro tras la restauración está el cambio en la fisonomía y disposición del Niño Jesús, ahora con una anatomía mucho más acorde con la época del cuadro, y que como dato anecdótico lleva un collar de cuentas y rama de coral, que era un amuleto contra el mal de ojo, que antes no se veían, pero que en los estudios radiográficos ya se apreciaban.
También en la restauración ha aparecido una rueda de molino a los pies de la Virgen, elemento clave para la identificación y cambio de denominación de esta obra, así como la diadema con joyel en el pelo de la Virgen, que es un elemento muy característico de la producción pictórica del Maestro de Perea.
La Generalitat compró esta obra en una subasta el 6 de octubre de 2016 por 9.000 euros, después de que la Dirección General de Cultura y Patrimonio la declarara Bien de Interés Cultural y evitara que una pieza del siglo XV tan singular como esta estuviese fuera de la Comunitat Valenciana.
La tabla restaurada muestra a la virgen sentada en un sitial amamantando al Niño Jesús, dispuesto en su regazo y en actitud de bendecir y con el orbe en la mano. Viste traje rojo con amplia capa blanca, colores propios del Gremio de Molineros. Sobre su cabeza luce una diadema de perlas y cabujón central, y aureola estrellada de pastillaje, que también vemos en otras obras del Maestro de Perea. El Niño Jesús muestra anudado al cuello un collar de cuentas y rama de coral. El fondo es de oro burilado y con tracería gótica. A los pies de la imagen, una rueda de molino atestigua su vinculación con el Gremio de Molineros.
Cuando llegó la tabla al departamento de pintura de caballete y escultura policromada del IVCR+i presentaba un estado de conservación delicado. Tanto en la pintura como en los dorados se evidenciaban un gran número de craqueladuras generalizadas por toda la superficie. Respecto al estrato de preparación se localizaron diversos levantamientos con falta de adhesión al soporte, pero la principal problemática con la que se encontraron los técnicos era el repinte que cubría casi la totalidad de la pintura. El barniz final aparecía oscuro y oxidado, lo que provocaba cambios cromáticos.
Una vez determinado el estado de conservación en el que se encontraba la obra, realizada una exhaustiva documentación fotográfica del estado inicial (fotografía visible, ultravioleta e infrarroja) y ejecutados los estudios científicos pertinentes (radiografía y análisis de materiales), se procedió a los trabajos de restauración.
Un "delicado y difícil" trabajo de recuperación pictórica que ha sacado a la luz una obra desconocida de este pintor activo en Valencia en el quicio de la transición del arte medieval hispano- flamenco al primer Renacimiento en Valencia.
Con la restauración de esta obra se incrementa el corpus pictórico del Maestro de Perea, al mismo tiempo que el Museo de Bellas Artes de València incorpora a su colección una pieza excepcional de este pintor y que el director del centro de arte ha calificado como una "obra fundamental en la historia del arte valenciano".
El Museu de Belles Arts de València abre sus almacenes, con motivo de celebrar el Día Internacional de los Museos, y prepara un recorrido por los pasillos en los que se conservan verdaderos tesoros, donde se lleva a cabo la catalogación de obras y donde suceden demás labores de mantenimiento que permiten que el museo funcione
Tras inaugurarse en València, la exposición 'Prohibit fixar cartells. REA' pasa por el Museu de Belles Arts de Castelló con una nueva selección de carteles que pretende recordar cómo ha sido el diseño en la provincia durante las últimas décadas