VALENCIA. Bester Zins, la sicav de la familia bodeguera valenciana Galbis-Ferri, ha sufrido una disminución del capital en circulación del 25,97%, tal y como ha podido saber este diario. Dicho vehículo de inversión, que está gestionado por DWS Investments (Deutsche Bank), cerró el primer trimestre del año con un patrimonio de 8,956 millones de euros, un 5,26% por debajo de los 9,453 millones que mantenía a buen recaudo el último día de 2015.
A 31 de marzo pasado, el número de acciones en circulación era de 745.288 títulos, que tras la reducción se han quedado en 193.551. Ni que decir tiene que el patrimonio de esta sociedad domiciliada en Madrid se ha reducido en la misma proporción hasta los 6,70 millones de euros, tal y como cerró este pasado viernes en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) donde cotiza como la mayoría de las sicavs.
A lo largo del primer trimestre del año, Bester Zins ofrecía una rentabilidad negativa del 5,26% frente a las ganancias del 4,31% en 2015, del 7,73% de 2014 y del 5,49% de 2013, según la información recabada por este diario de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Al frente de esta sociedad figura Manuela Galbis Ferri, mientras que en el consejo de administración aparecen Carlos Laso Galbis -como consejero delegado- y sus hermanos Mercedes, Miguel y Mónica. Precisamente Carlos es el director de la bodega Pago Casa Gran de Moixent (DOP Valencia), cuya familia producía y embotellaba vino en la década de los sesenta en la finca Casa Gran. Además, la bodega se encuentra en la falda de la Bastida de Les Alcusses que alberga el poblado íbero donde fue hallado el 'Guerrero de Moixent'.
La bodega -tal y como se conoce ahora- tuvo sus inicios en el año 2006 donde su fundador Carlos Laso, la diseño y construyó con una característica diferente que la hace única. La bodega se encuentra preparada para manipulación por gravedad de todo el proceso del vino, preparado para cuidar la calidad en todo el proceso. Es aquí donde se unen tradición y tecnología para crear unos vinos únicos y con carácter como los que presenta Pago Casa Gran.
Fue en 2005 cuando la bodega se acogió al mundo ecológico y tres años más tarde recibió el certificado ecológico de la Unión Europea y dos años después el certificado de Delinat. Todo ello 'regado' con un buen número de reconocimientos, tanto nacionales como internacionales, a sus caldos.
Con el paso de los años desde la Bodega Pago Casa Gran se está logrando mantener el suelo vivo, aumentar la biodiversidad, mejorar en el conocimiento de viñedos y suelos, y conservar una filosofía cuidado de medio ambiente reflejadas en las características únicas de los vinos, tal y como se recoge en la presentación en su web corporativa.