La traca final del Año Sorolla

VALÈNCIA. Todavía hay Año Sorolla para rato. Si bien fue en el año 2023 en el que se pisó el acelerador con los actos vinculados al centenario del fallecimiento del pintor, con una batería de exposiciones y proyectos que salpicaron la práctica totalidad de la agenda cultural, este 2024 también sigue mimando al pintor valenciano. Y es que los proyectos vinculados de manera directa o indirecta al centenario no cesan, con un broche final a la vuelta de las vacaciones que pasa por la inauguración de dos grandes exposiciones, una en Madrid y otra en València, y la esperada rehabilitación de la Casa Museo, por lo que cerrará al público desde el próximo mes de octubre. 

Será Fundacion Bancaja la institución encargada de despedir el Año Sorolla en València. El centro cultural inaugurará el próximo otoño la exposición temporal En el mar de Sorolla con Manuel Vicent, un proyecto que une el pincel de Sorolla con la pluma de Vicent para componer un relato luminoso en torno al Mediterráneo. Más de un centenar de lienzos con el mar como hilo conductor, entre los que se incluyen obras que excepcionalmente han salido de su sede en el Museo Sorolla, dan forma a una muestra que ofrece un innovador enfoque expositivo a través de un comisariado literario que una trazos y letras.

La exposición, que ya se pudo en el Museo Sorolla de Madrid,  propone a través del relato y las evocaciones de las propias vivencias de Manuel Vicent un recorrido por la rica representación del Mediterráneo en la obra de Sorolla que incluye sus icónicas pinturas de niños representados de forma lúdica en la playa; las escenas de pescadores y pescadoras durante y después de la pesca; los retratos de miembros de la burguesía retratados por el artista; y la visión personal que plasmó en sus cuadros del mar de Xàbia. 

Será la Galería de las Colecciones Reales la sede de la segunda gran exposición, en este caso en Madrid, con la que se despedirá el Año Sorolla. En octubre abrirá sus puertas la muestra Sorolla, cien años de modernidad, un proyecto organizado por Patrimonio Nacional y Light Art Exhibitions en colaboración con el Museo Sorolla y la Fundación Museo Sorolla que reunirá cerca de ochenta piezas de instituciones como la Hispanic Society of America, el Museo del Prado o el Musée d’Orsay, entre otros. Además, a estas dos grandes exposiciones, se sumarán dos más a finales de 2024: Joaquín Sorolla y la Valencia de 1900, en la catedral de Burgos, y Joaquín Sorolla en Andalucía, en el Museo Carmen Thyssen de Málaga.

Rehabilitación y ampliación del Museo Sorolla

La traca final del Año Sorolla llega, además, con otra noticia de especial relevancia para el legado del pintor. El próximo mes de octubre el Museo Sorolla cerrará sus puertas al público para acometer los trabajos finales de rehabilitación y ampliación del complejo, obras que se llevan desarrollando desde 2022, siendo esta la primera vez en los más de 110 años de historia del edificio que se acomete una actuación integral de este tipo, ya que con anterioridad se habían realizado intervenciones de carácter parcial.

Con una reapertura prevista para inicios de 2026, en estos últimos meses del año se terminarán las obras de ampliación de la primera fase, que corresponden a unos espacios colindantes al museo, de más de 2.200 metros cuadrados de superficie, donde se situarán unas nuevas áreas y servicios de los que el museo carece en este momento o que dispone pero de manera limitada, entre los que se contemplan nuevas salas de exposiciones temporales, salón de actos, almacén, taller de restauración o muelle de carga.

Será en octubre cuando se inicie la segunda fase las obras, que comprende la rehabilitación integral de la arquitectura e instalaciones de la Casa Sorolla “dado el desgaste y la obsolescencia que el edificio presenta”, informan desde el Ministerio de Cultura. Así, “preservando los valores y el carácter original de la arquitectura y sus espacios”, se llevará a cabo una rehabilitación del edificio, de los elementos históricos de la casa Sorolla, la renovación las instalaciones y se dotará de sistemas de control medioambiental a todas las zonas de exhibición de bienes culturales para una mejor conservación de los mismos.