VALÈNCIA. (EP) La Unió de Llauradors ha pedido a la Comisión Europea y al Gobierno de España el cierre de las importaciones de frutas y hortalizas procedentes de Turquía hasta que se realice una auditoría ante "las numerosas alertas sanitarias detectadas por contener materias activas no autorizadas o por observar Límites Máximos de Residuos (LMR) superiores a los autorizados".
En este sentido, la Unió ha enviado sendos escritos a la DG Sante, responsable de las políticas de la UE sobre salud y seguridad alimentaria, y a la dirección general de Sanidad de Producción Agraria del Ministerio de Agricultura trasladándoles una serie de peticiones.
Al respecto, señala que tras muchos meses de reiteradas denuncias por las numerosas alertas sanitarias que estaba detectando el RASFF (sistema europeo de control alimentario), la CE incrementó en noviembre la frecuencia de los controles a estas importaciones. Concretamente, subió al 20% la frecuencia de los controles a realizar en naranjas, mandarinas, clementinas, wilkings e híbridos similares de cítricos y en los limones, así como en pimiento y granadas procedentes de Turquía.
También se aumentaron los controles a otros productos como las avellanas hasta el 20%, o los pistachos y las hojas de parra hasta el 50%. Por su parte, los pomelos, a pesar de las alertas, no entraron en ese aumento de frecuencia de controles.
Por ello, reclama el incremento de la frecuencia de los controles físicos y de identidad hasta el 50% para todas las frutas y hortalizas turcas y poner así mismo fin a "la asimetría arancelaria", ya que mientras Turquía exporta a la UE con un arancel del 20%, a España se le aplica el 54% para exportar a Turquía.
Otro aspecto que plantea es la suspensión automática de importaciones procedentes de países que no tengan ratificado el Convenio del Consejo Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia de género, como es el caso de Turquía.
Al respecto, señala que un estudio que ha realizado con datos oficiales y tras analizar las alertas sanitarias posteriores a la entrada en vigor del Reglamento de Ejecución (UE) 2021/1900, se concluye que durante el periodo comprendido entre el 23 de noviembre de 2021 y el 6 de marzo de 2022 (103 días) hubo un total de 100 alertas sanitarias solo en cítricos importados de Turquía, lo que significa casi una alerta al día. Muchas de estas alertas son además por detectar la presencia de Metil Clorpirifos o Clorpirifos, sustancias activas prohibidas en territorio comunitario.
Estas cifras exclusivamente de cítricos sin valorar "las múltiples alertas" en otros productos como pimientos, granadas o hojas de parra, reflejan un elevado número de alertas sanitarias en las importaciones de frutas y hortalizas procedentes de Turquía. Por ello, se insta al Ministerio de Agricultura a que trabaje ante las instituciones competentes de la UE con objeto de adoptar esas medidas.
El secretario general de la Unió, Carles Peris, señala que "es vergonzoso que la Comisión Europea no tenga un protocolo de análisis y actuación si las medidas no son efectivas como es el caso de las importaciones de Turquía, quien pese a aumentarle los controles no parece ser capaz de resolver esta situación". Por eso hay que ser "más duros al respecto" y advierte: "si las autoridades comunitarias solo reaccionan con nuestras denuncias, seguiremos con ellas".