ALICANTE. La Comunitat Valenciana, una de las autonomías con mayor número de sociedades mercantiles activas en España, cuenta con al menos unas 5.000 empresas zombis. Es decir, firmas que siguen operando, que mantienen su actividad, firman contratos, producen, etc, pero que están fuertemente endeudadas y no tienen capacidad de generar recursos suficientes para afrontar la devolución de dicha carga financiera.
Según un estudio elaborado por los analistas de Iberinform a partir de las cuentas anuales que presentan las empresas en el Registro Mercantil, en toda España hay al menos 48.000 empresas que pueden considerarse zombis. Del total, un 10% está en la Comunitat Valenciana, según los autores del estudio, y de hecho es la tercera autonomía con mayor número de empresas zombis, tras Madrid (21%) y Cataluña (19%).
Estas "empresas vulnerables" presentan al menos dos ejercicios consecutivos en los que sus resultados operativos fueron insuficientes para cubrir los compromisos derivados de su endeudamiento financiero, según explica Iberinform. "Cabe esperar que el endurecimiento progresivo de los tipos de interés iniciado en 2022 provoque un incremento progresivo de este censo de empresas altamente vulnerables".
Una empresa zombi es, a efectos de este estudio, "aquella que presenta una baja rentabilidad incapaz de generar recursos para hacer frente a los costes financieros de sus deudas a corto y medio plazo". Estas empresas logran sobrevivir mediante la refinanciación continua de su deuda, por lo que "pueden llegar a condicionar el desarrollo de una economía". En este sentido, su futuro incierto a largo plazo y su actividad con el resto del tejido productivo "elevan los riesgos de impago, mientras que la continuidad de su actividad impide que los recursos se reasignen a empresas más eficientes".
El tamaño es un factor que influye en la capacidad de una empresa para sentarse a renegociar con sus acreedores financieros, pero sin embargo el estudio de Iberinform muestra, según sus autores, que el fenómeno de las empresas zombis se da en todos los segmentos: en su gran mayoría se trata de microempresas (57% del total), seguidas por pequeñas (30%), medianas (9,2%) y también grandes empresas (3,9%).
Por sectores de actividad, el mayor número de empresas zombis se encuadra en el de la construcción y la actividad inmobiliaria (22% del total), seguido por el comercio (21%) y la industria manufacturera (14%). En cuanto a su distribución territorial, casi la mitad de las empresas vulnerables se concentra en las comunidades de Madrid (21%), Cataluña (19%) y Comunitat Valenciana (10%). Les siguen Andalucía, (9,9%), Galicia (6,7%), País Vasco (6,0%) Castilla y León (4,3%), Aragón (4,1%), Canarias (3,7%) y Castilla-La Mancha (3,2%).
Precisamente, durante la moratoria concursal aprobada por el Gobierno como una de las medidas de apoyo a las empresas durante la pandemia, fueron numerosos los expertos que alertaron de que dicha moratoria (que permitía a empresas en situación de insolvencia ignorar su obligación de declararse en concurso) iba a multiplicar el número de empresas zombis, que seguirían operando cuando en realidad deberían ir a liquidación. Así, algunos estudios apuntaban a que se podría llegar a doblar el número de estas empresas, aunque lo cierto es que el efecto en la concursalidad tras el fin de la moratoria (en junio de 2022) no ha sido hasta el momento tan acusado como se temía.