ALICANTE. El año 2023 fue complejo para el grupo acuícola Avramar. Como ya contaba este medio, en primavera del pasado año cerraba su sede en la Vall d'Uixó para trasladar su base de operaciones al completo a València. De esta forma, la firma de capital griego consumaba una reagrupación que ya venía estudiando tiempo atrás, en concreto desde 2021. Además de este movimiento y cambio de sede, las cifras de su último ejercicio también fueron movidas. La matriz del grupo en el país es Avramar Seafood S.L. y tiene en su seno a varias mercantiles. La facturación de una de ellas, Avramar Ibérica SL, bajaba en 2023 hasta los 95 millones de euros, un 19% menos que los 117,39 millones de euros que conseguía en 2022. Pero aún más llamativo es el cambio en el beneficio. Si en 2022 era positivo -440.000 euros-, el año pasado cayó de forma abrupta: hasta los 3,84 millones en negativo, ha empeorado en un 973%.
Las circunstancias internacionales que llevaban a una escalada de la inflación, afectando a los sectores de la alimentación y la gran distribución han tocado a Avramar que, según la compañía, "ha tomado medidas de repercusión de costes a sus clientes consiguiendo niveles positivos de rentabilidad" y que esperan que evolucionen de forma favorable en el futuro. En concreto, la caída de facturación y del beneficio, según la memoria de la mercantil Avramar Ibérica SL de 2023, es consecuencia, principalmente, "de la evolución del negocio y de la situación financiera del grupo en Grecia".
Y es que, tal y como apunta la compañía, el origen de ese empeoramiento se debe al registro de una provisión por responsabilidad por importe de 3,28 millones de euros. Dentro de la restructuración de la deuda financiera de Avramar Ibérica SL, la mercantil es garante de la deuda que Predomar tiene con los bancos. Esta firma realizó un ERE de toda la plantilla y cesó su actividad en 2023. Eso sí, Avramar se muestra "optimista respecto a su evolución futura", teniendo en cuenta las acciones realizadas en ese complejo ejercicio "y la finalización de las negociaciones bancarias sobre la reestructuración de su deuda". Este hecho, aseguran ya se está plasmando positivamente en los resultados obtenidos en los primeros meses de 2024.
Asimismo, en el tercer trimestre de 2023 Avramar comenzaba un proceso de refinanciación de su deuda, a partir del cual esperan "el mantenimiento de todas las líneas de circulante y recalendarización de pagos de gran parte de sus préstamos". El acuerdo se firmaba en febrero de 2024 y en verano de este año, un juzgado ha estimado esa solicitud. Este año, la mercantil también ha condonado saldos que cobrar con diversas compañías.
El plan de negocio de la firma en los próximos cinco años pasa por concentrar la producción de modo estratégico en la costa de Alicante, con sus piscifactorías, y enfocarse en la venta de pescado fresco y entero.
Ya en julio de 2024, un fondo de Abu Dhabi, Mubadala Investment, llegaba a un acuerdo para salir del grupo de Avramar. Esa participación ahora la traspasa a otra firma socia, la gestora de fondos Amerra Capital, de Estados Unidos. Tal y como registraba la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV) se daba esta operación de concentración por la que Amerra adquiere el control exclusivo de Avramar Seafood, S.L. La operación da lugar, por tanto, a un cambio en la naturaleza del control de Avramar.
El grupo, centrado especialmente en la producción de especies mediterráneas como la lubina y la dorada, ostenta más de diez piscifactorías en Grecia y España que producen más de 245 millones de alevines al año. En territorio español, cuenta con tres. Una en Nules, y se encuentra en proceso de ampliación de su producción; otra, en Alicante; y otra, en Murcia. Tiene también múltiples granjas en mar abierto, repartidas por Castellón, Alicante, Murcia y las Islas Canarias, y dos plantas de envasado y procesado, una de ellas en Castellón.