VALÈNCIA. El nuevo Mazda CX-60 e-SKYACTIV PHEV introduce la primera tecnología híbrida enchufable de la compañía en el mercado europeo de los SUV.
Es el modelo más importante para Mazda en más de una década y está llamado a convertirse en una nueva referencia porque representa todo lo que la marca ha ido incorporando a su ADN a lo largo de un siglo: un diseño extraordinario tanto en el exterior como en el interior, acabados según la mejor tradición japonesa, tecnologías avanzadas orientadas al ser humano y una gama de motorizaciones de última generación.
El nuevo Mazda CX-60 tiene un estilo hermoso, dinámico y transmite la inteligencia y la elegancia del diseño Kodo más novedoso. Explota el concepto japonés del Ma, el cual representa la sosegada y majestuosa belleza del espacio vacío, y que encaja a la perfección con la solidez de una arquitectura típicamente de SUV, con motor delantero y tracción trasera.
El diseño interior, elegante y con excelentes calidades, es inconfundiblemente Mazda, con guiños a la estética japonesa. Por ejemplo, juega con conceptos como el Kaichô, que es la mezcla de distintos materiales y texturas para generar un punto de irregularidad, combinando madera de arce, el cuero napa, refinados tejidos japoneses y detalles cromados. También está presente el Musubu o el arte de anudar y conectar, que ha servido de inspiración para los detalles de las costuras del panel del salpicadero.
El tratamiento de las molduras en madera de arce se inspira en el Hacho, otro concepto estético japonés que explota la asimetría y la irregularidad intencionada. Los tejidos empleados tienen distintas fibras y patrones que responden a los cambios en la iluminación. Se ha empleado también una técnica japonesa de costura, llamada Kakenui, que produce costuras "colgantes" y deja espacios entre los tejidos de los guarnecidos, que permiten entrever el material que hay debajo.
Mazda ha replanteado y refinado sus tecnologías orientadas al ser humano para perfeccionar la experiencia de conducción Jinba Ittai y atender más que nunca a las necesidades individuales de cada conductor. El innovador Sistema de personalización del conductor de Mazda reconoce al conductor y ajusta automáticamente el entorno en función de sus características físicas y sus preferencias personales: posición del asiento, volante, retrovisores, pantalla Head Up Display e incluso la configuración del sistema de sonido y la climatización.
El Mazda CX-60 e-SKYACTIV PHEV es el primero de una serie de modelos híbridos enchufables que la marca introducirá en Europa. Su motorización combina un motor de gasolina 2.5 l. Skyactiv-G de cuatro cilindros e inyección directa con un motor eléctrico de 100 kW, una batería de alta capacidad de 17,8 kWh y 355 V y una transmisión automática de ocho velocidades totalmente nueva.
La suma de un motor de gasolina y otro eléctrico hace posible un desarrollo de potencia total de 327 CV/241 kW y una poderosa entrega de par de hasta 500 Nm, lo que convierte al Mazda CX-60 PHEV en el modelo de producción en serie más potente de la historia de la compañía. Sus prestaciones son impresionantes, con una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 5,8 segundos.
Pero, además, sus credenciales medioambientales son extraordinarias. El consumo de combustible WLTP en ciclo combinado es de tan solo 1,5 l/100 km. Las emisiones de CO2 WLTP en ciclo combinado se han rebajado hasta 33 g/km.
El motor eléctrico e-Skyactiv del Mazda CX-60 ofrece una autonomía de 63 km mientras el vehículo circule a menos de 100 km/h. La batería se carga por completo desde vacío en 4 horas, con un cargador de corriente alterna normal compatible con la red eléctrica de 220-240 V.
La Arquitectura escalable multisolución Skyactiv del nuevo Mazda CX-60 incorpora importantes mejoras que redondean el comportamiento dinámico. Por ejemplo, y en línea con el planteamiento centrado en el ser humano de Mazda, la rigidez de la carrocería ayuda a que el conductor perciba la respuesta del vehículo de forma inmediata, sin retardo; los asientos ayudan a los ocupantes a mantener el equilibrio de forma natural mientras el coche se mueve; la suspensión contribuye a estabilizar el aplomo del vehículo, con la intervención adicional del Kinematic Posture Control (KPC), un sistema de control del aplomo exclusivo de Mazda.
La batería de alta tensión se ha situado entre el eje delantero y el trasero, en una posición lo más rebajada posible dentro de la carrocería, con lo que el centro de gravedad resulta especialmente bajo. Esta característica, combinada con un sistema de tracción integral permanente con transferencia de par entre ejes, proporciona a este modelo una extraordinaria maniobrabilidad, a la altura de los mejores del segmento premium.
El nuevo Mazda CX-60 cuenta con un completo equipamiento de tecnologías de seguridad i-Activsense avanzadas de asistencia al conductor, para unas prestaciones de seguridad activa excepcionales. Mazda espera que el vehículo obtenga una calificación en seguridad de 5 estrellas Euro NCAP.
Son varias las novedades en la seguridad activa: un monitor de visión 360° que mejora la visibilidad a través del vehículo durante la circulación a baja velocidad (See-Through View,); asistente de intersecciones (TAP); detección de peatones traseros (SBS-R); mantenimiento en carril de emergencia (ELK); asistente de velocidad inteligente (i-ACC) y función de ayuda al salir del habitáculo (BSM Vehicle Exit Warning).