VALÈNCIA (EP). El juicio por un presunto desfalco en el Palau de les Arts de València llega a su recta final cinco años después de que se produjeran las detenciones. Tras casi dos meses de vista, que arrancó el pasado mes de noviembre, se están presentando los escritos de conclusiones y la última sesión fijada se celebrará este lunes. El procedimiento ha sido denso y técnico pero no ha estado exento de algunas anécdotas, protagonizadas, principalmente, por el presidente del tribunal.
De hecho, ha insistido mucho en que se cumplieran los tiempos y las citaciones durante la vista, y cuando así ha ocurrido, lo ha comentado con los testigos: "Hemos cumplido con el horario, al final nos tendrán que dar algún tipo de reconocimiento o medalla", ha bromeado en alguna ocasión.
A lo largo de la vista también se han 'colado' referencias a un expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y a la falta de financiación para la Comunitat Valenciana. Fue la exconsellera de Cultura 'popular' Trini Miró, quien aprovechó su declaración como testigo para poner de manifiesto que el gobierno del exdirigente socialista "no daba dinero para cultura y esto afectaba al Palau".
Al respecto, declaró: "Estábamos atravesando una época de crisis en todos los niveles y el Palau tenía falta de recursos económicos fundamentalmente por el agravio comparativo y la carencia de recursos por parte del gobierno de Zapatero". Tras insistir en este aspecto, el presidente del tribunal cortó su intervención y le pidió que se centrara en lo que se le estaba preguntando.
Otros testimonios han aludido a la que fuera intendente del coliseo Helga Schmidt, una de las principales acusadas en el procedimiento que falleció el pasado mes de septiembre tras una larga enfermedad. Una testigo, por ejemplo, relató como la exresponsable artística prefería que sus empleados le remitieran escritos en un determinado tipo de letra, la 'Comic Sans'.
Otra testigo, la expresidenta del Comité de Empresa del Palau, preguntada por si había personas "enchufadas" en el centro cultural, respondió que era un tema que pertenecía a una "leyenda urbana" y "a cotilleos". "Siempre se comentaba que no sé quién venía por no sé quién, pero a mí en ningún momento me ha constado algo así", aseveró.
Por su parte, un perito propuesto por las defensas matizó el calificativo de "importantísimas" que él mismo había utilizado. Afirmó, tal y como contemplaba su informe, que se habían hecho "importantísimas" gestiones en 2008 por parte de Patrocini. Preguntado por el fiscal por cuáles fueron esas "importantísimas" cuestiones, él respondió: "buscar y conseguir patrocinadores, viajes, etc".
El ministerio público le rebatió que la mayoría de esas gestiones a las que aludía se referían al evento Viva Europa, y el testigo comentó que "entonces no serían tan importantísimas". "Los calificativos a veces... pero bueno, consiguieron el objetivo y para mí eso era importantístimo", señaló.