VALENCIA. "Llevo más de 30 años trabajando en los mercados y no recuerdo una escabechina como esta en tan poco tiempo sin argumentos que no estuvieran sobre la mesa hace meses". Son palabras de un veterano gestor de fondos de inversión consultado ayer por la tarde por este diario tras el nuevo correctivo sufrido por el Ibex 35, que cayó a niveles de julio de 2013. "Y viendo las caídas que se suceden en estos momentos -la conversación tuvo lugar cuando e Dow Jones perdía el 2%- miedo me da pensar en qué sucederá mañana -por hoy-". Un recorte que por otro lado se redujo al cierre de la sesión neoyorquina hasta el 1,56%.
"Espero que Draghi este jueves aporte algún soplo de aire fresco anunciando un mayor ritmo de compras de su QE, pero ya me dirás tú con todo lo que ha hecho antes llenando el mercado de euros y mira cómo estamos. Aquí subyace algo más que no conocemos porque la ralentización de la economía china y su impacto sobre las materias primas no ha sido de la noche a la mañana. ¿Qué recomiendo? Tranquilidad y no dejarse llevar por el pánico vendiendo a cualquier precio. No", añadía.
Lo cierto es que el Ibex 35 ya se deja en el camino en lo poco que va de año un 13,2% -teniendo en cuenta el cierre de ayer que alcanza el 20% desde primeros de diciembre- y está a un paso de perder el soporte de los 8.200 puntos, que de cederlo lo llevaría casi irremisiblemente hasta los 8.000 puntos. "Confío en que antes se produzca algún rebote porque estamos en una auténtica situación de pánico vendedor".
De cara a la reunión de hoy del BCE -conviene recordar que la Reserva Federal de Estados Unidos se reúne la semana que viene- no se esperan muchas novedades entre los analistas. Así, Felipe López-Gálvez de SelfBank reconoce "no esperaramos que Draghi vaya a mover ficha en esta ocasión y probablemente se limitará a reiterar su habitual discurso", sin descartar "alguna de sus ya famosas frases tranquilizadoras".
En la misma línea se muestra el analista de XTB Joaquín Robles, que ha indicado que lo más probable es que Draghi "muestre su preocupación acerca de la situación actual y continúe con su apoyo incondicional a los mercados", ante lo que abrirá la posibilidad de adoptar nuevas medidas si fuese necesario.
"La reciente fuerza del euro y la volatilidad de los mercados financieros podrían incentivar un tono aún más pesimista del esperado por parte de Draghi", opinan por su parte desde Ebury, que consideran que el presidente del BCE reiterará su intención de hacer "lo que sea necesario" para prevenir la deflación.
Para Daniel Pingarrón, estratega de Mercados de IG, los mercados verían con muy buenos ojos un recorte de la tasa de depósitos y un aumento de la cuantía mensual de compras del BCE, que provocaron "una gran frustración" al no ser incluidas en el paquete de medidas anunciado por Draghi el pasado mes de diciembre. El aumento del montante de compras "sería muy bien recibido por las bolsas", subraya