VALÈNCIA. “A mí también me gustan las mujeres y no las acoso”. “La precarietat està feminitzada”. “Estoy a un señoro de quemar todo”. “Que ser mujer no nos cueste la vida”. Estos son algunos de los mensajes que han ocupado las pancartas de las principales movilizaciones feministas de los últimos años en València, carteles que se han mostrado desde 2018 en distintas concentraciones con motivo del 8 de marzo (Día Internacional de las Mujeres), el 25 de noviembre (Día Internacional para Elminar la Violencia contra la Mujer) o en respuesta a casos como el de La Manada. Estos –y otros tantos- mensajes pasan ahora de las calles al espacio expositivo con la muestra Las calles serán siempre nuestras, que reúne una selección de imágenes tomadas por la fotógrafa valenciana Eva Máñez.
El proyecto, que se enmarca en el Festival Internacional de Cine y Derechos Humanos de València (Humans Fest) y se presenta en la sede de la Diputació de València, busca presentar una fotografía global de las marchas de los últimos años en la ciudad de València, convertida en espejo de un movimiento que va más allá de sus fronteras. Es este juego entre lo local y lo global una de las claves del discurso del proyecto, que quiere subrayar la “diversidad y transversalidad” del movimiento. “Tenemos mujeres migrantes, mujeres que están hablando de diversidades culturales, de diversidades en la edad, de precarización de los cuidados o agresiones", ha destacado Máñez durante la presentación, en la que ha estado acompañada por la directora del Humans Fest, Majo Siscar; la diputada provincial de Cooperación Internacional, Mentxu Balaguer, y la periodista y miembro de la red Les Beatrius Rosa Solbes, entre otras.
“La huelga de mujeres de 2018 fue un punto de inflexión que nos dio la oportunidad de ser conscientes de la fuerza que tenemos en las calles", explicó Máñez durante la presentación del proyecto, una muestra que recoge una pequeña selección de imágenes que dan cuenta de un movimiento que, explican desde el festival, es imparable. “La selección de imágenes y el título de la muestra se basan en los cánticos y las proclamas que se oyen habitualmente en estas manifestaciones. Son gritos que piden cambios hacia la igualdad, que reivindican que nuestros cuerpos nos pertenecen a nosotras y a nadie más, que avisan de que no volveremos a ser relegadas al hogar ni a conformarnos con más violencias o agresiones”.
"Es muy fuerte que todavía tengamos que reivindicar que los derechos de las mujeres son derechos humanos", ha declarado por su parte la directora del festival, Majo Siscar, quien ha recordado que la celebración de esta edición se enmarca en la conmemoración de los 75 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Con esta muestra, además, se quiere poner negro sobre blanco que el feminismo no es una cuestión sobre la que hablar únicamente durante el mes de marzo, un camino que pasa por amplificar el mensaje y, también, por primar el "rigor" en su comunicación. "El mensaje feminista tiene que ser aún publicitado por tierra, mar y aire [...] Los problemas de las mujeres son mucho más grandes y tienen que ser dados a conocer con mucha más asiduidad y rigor", ha relatado Rosa Solbes, miembro de Les Beatrius.
Esta exposición engrosa la programación del festival, que afronta ahora su “semana grande”, que culminará el sábado cuando se conocerán los trabajos premiados de esta edición. En el camino, el festival propone numerosas actividades que salpicarán toda la ciudad. Así, de lunes a viernes se proyectará el grueso de largometrajes de ficción y documentales de la Sección Oficial en Cines Babel, mientras que la Sala SGAE Centro Cultural acogerá los cortometrajes que también entran en competición. Por su parte, el Colegio Mayor Rector Peset será el escenario de la Muestra de Cortos Participativos, donde el lunes 5 y el miércoles 7 por la tarde se proyectarán los trabajos realizados por diferentes colectivos sociales en talleres audiovisuales y se celebrarán coloquios para reflexionar sobre el poder del cine para la transformación social.
Asimismo, en La Filmoteca continuará el “ciclo de autora” que este año ha estrenado la directora Isabel Coixet como premiada honorífica Pau i Justícia. En concreto, el próximo viernes será el turno de su documental El sostre groc, que narra los abusos sexuales cometidos en la Escuela de Teatro de Lleida y se acompañará de una mesa redonda posterior sobre por qué no ha habido un #metoo generalizado en España. Participarán dos protagonistas del documental: Cristina García y Aida Flix. La recta final del XIV Humans Fest será protagonizada por una sesión gratuita de “cine a la fresca” en la Plaza de la Ermita del barrio de Orriols (viernes 9 a las 21 horas) y una segunda entrega de los llamados Vermuts Humans: encuentros con activistas en la cafetería del MuVIM para conversar en un ambiente distendido sobre derechos humanos. En concreto, el sábado 10 a las 12 horas será el momento de escuchar a mujeres que atraviesan intersecciones más allá de su género.