VALÈNCIA. Las empresas del sector químico de la Comunitat pagan los mejores salarios del conjunto de la industria valenciana, por encima de otros sectores punteros en la región como la automóvil, el cerámico o la industria agroalimentaria. En concreto el gasto medio por trabajador de las compañías del sector se eleva a 40.400 euros, muy por encima de la media de la industria en general (33.000) tras haber crecido un 2,4% entre 2008 y 2014 a pesar de la crisis.
El elevado nivel salarial es uno de los rasgos definitorios del sector incluidos en el diagnóstico elaborado por la Universidad Politécnica (UPV) como base del nuevo Plan Estratégico de la Industria que prepara el Consell y que esta semana fue presentado en el Observatorio de la Industria.
Según los datos expuestos por Jose Luis Hervas-Oliver, doctor en Organización de Empresas por la UPV y director del proyecto del futuro Plan Estratégico de la Industria Valenciana durante la asamblea anual de la Asociación de Empresas Químicas de la Comunitat (Quimacova), el sector químico se caracteriza también por copar el 18% de los gastos de innovación en la industria de la Comunitat aunque representa solo el 2,5% del tejido industrial.
A su juicio, los rasgos que mejor definen a este sector relativamente desconocido a pesar de las grandes magnitudes que maneja son la innovación, por ser intensivo en conocimiento; la resiliencia para superar la crisis, con crecimientos de producción acumulados del 9,1% desde 2008; o la capacidad para atraer talento y generar riqueza.
En conjunto, las empresas químicas valencianas facturan más de 4.500 millones de euros, representan el 10% del PIB regional y emplean a 13.500 personas.
Según los datos del experto de la UPV, es el sector industrial de cabecera junto al automóvil que más esfuerzo dedica a innovación, por delante del alimentario. En cifras absolutas, la inversión de las empresas químicas superó los 66.200 millones de euros en 2015.
El porcentaje de firmas químicas con actividades innovadoras supera el 50%, por delante del transporte o el equipamiento eléctrico, que superan ligeramente el 40%. Además, casi la mitad de las 529 empresas que integran el sector en la Comunitat invierten en I+D.
Otro de los rasgos que definen a estas empresas es el valor añadido bruto (VAB) generado por empleado, el más elevado de los sectores industriales de la región solo por detrás del automóvil. Estos dos sectores superan el 60% del VAB por ocupado frente al resto de sectores industriales de la Comunitat.
Al margen de los datos específicos del sector químico, el profesor Hervas-Oliver también detalló las conclusiones de la fase de diagnóstico desarrollada durante siete meses para conocer el punto de partida de la industria de la Comunitat antes de elaborar el nuevo Plan Estratégico.
En esta fase, en la que han participado 500 agentes, se han generado 4 informes (situación general, análisis del territorio, informe de metodología e informe de actuaciones) que suman 900 páginas.
Además, el Instituto de Cartografía ha generado más de 70 mapas para geolocalizar a la industria valenciana, lo que ha dado lugar a una suerte de atlas económico de la Comunitat.
El experto de la UPV destacó que la Comunitat siempre ha sido una región industrial y que la recuperación de este sector tras la crisis ha sido más rápida que en la media de España, con un 22% de incremento entre 2013 y 2016.
"En los últimos tres años, el PIB de la industria ha crecido mas de un 20% y muchos sectores están en cifras de 2008 y 2009. Todo ello con un tercio menos de empleados pero productividades mucho más altas", resaltó.
Además, recordó que la Comunitat tiene 355.000 ocupados industriales (18% del total), lo que la sitúa como la segunda región con más ocupados en la industria por detrás de Cataluña.
Aún así, detalló una serie de "temas pendientes" como la necesidad de avanzar en innovación. "Somos una región intermedia en innovación. Pese a la gran aportación de la industria, la innovación no se corresponde con el peso del empleo. El gasto en I+D es del 1% del PIB", explicó.
Además, detalló que en los últimos años se han definido cinco sectores clave en cuanto a su Valor Añadido Bruto (VAB): alimentación, productos minerales no mecánicos, automóvil, cerámico, química y plásticos. "Esto rompe la idea de que la industria de la CV se asienta sobre sectores tradicionales. Estos sectores configuran la columna vertebral de la industria de la CV", manifestó Hervás-Oliver.
Por su parte, el director general de Industria de la Generalitat, Diego Maciá, intervino en la clausura de la asamblea de Quimacova y destacó que el objetivo del Consell es situar el peso de la industria valenciana en el 25% del PIB regional "porque eso da estabilidad a la economía y mejora la calidad en el empleo".
"El Consell es consciente de la perdida de peso relativo que ha sufrido la industria en los últimos años, entre otras cosas por el tamaño reducido de las empresas, una cuestión que debemos ir resolviendo porque en general implica más dificultades para acceder a la financiación o para internacionalizarse", aseguró Maciá..
La asamblea de Quimacova también reeligió a Miguel Burdeos, presidente y director general de SPB, como presidente de la organización durante otros cuatro años.
La asociación celebró su 20 aniversario con un evento que duró dos días y contempló presentaciones, conferencias y ponencias y mesas de debate.