VALÈNCIA. Este martes, la Conselleria de Sanidad acoge una reunión técnica con la Junta Central Fallera y la Interagrupación de Fallas para discutir las medidas y restricciones a aplicar específicamente en las fiestas josefinas, que inusualmente tendrán lugar este año entre el 1 y el 5 de septiembre. Las fallas han realizado varias propuestas al departamento del Consell que dirige Ana Barceló y esperan que el encuentro sirva para decidir qué actos se llevan a cabo y cómo se desarrollarán las Fallas de 2021.
Son muchas las cuestiones sobre la mesa, entre las cuales se encuentran la concreción del aforo en las carpas y la organización para grandes actos como la Ofrenda, la Plantà o la Cremà. El documento, trabajado desde el colectivo fallero junto con técnicos, plantea la celebración de todos los actos al aire libre y siempre en cumplimiento con el aforo y el mantenimiento de la distancia social en los recintos festivos, tales como carpas y casales.
Este martes, fuentes de las fallas consultadas por este diario señalaban que una cuestión que se pretende concretar es la del aforo en las carpas al aire libre. La intención es que se deje claro que las instalaciones temporales ubicadas en las calles a modo de carpa -que este año serán abiertas para prevenir los contagios- se asimilen a las terrazas de la hostelería en cuanto a las restricciones y no se plantee compararlas con espacios cerrados.
Lo cierto es que las medidas restrictivas aprobadas por la Conselleria de Sanidad hasta el 6 de septiembre, y que fueron publicadas en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) ya fijan que las "sedes festeras" de las fiestas tradicionales tendrán una limitación general de aforo del 75% y que si se llevan a cabo en ellas actividades asimilables a la hostelería o la restauración -como cenas o actos parecidos-, se tratarán exactamente como locales de hostelería.
Así pues, si se hacen actividades de este tipo en casales, el aforo será del 50% y cumpliendo con la pertinente ventilación. Las medidas establecen para las terrazas de la hostelería un aforo del 100% -sin restricciones- y que se considerará como terraza "todo espacio no cubierto o todo espacio que, estando cubierto, esté rodeado lateralmente por un máximo de dos paredes, muros o paramentos", esto es, las carpas de este año. Algo que, si bien aparece ya aprobado, las fallas quieren que se deje claro en las medidas expresas que se aprueben para la fiesta.
Pero el documento va más allá, y plantea a la Conselleria de Sanidad la celebración de la Ofrenda, y que si no se puede hacer con público, se haga "a puerta cerrada". Todo ello, claro está, en función de la incidencia acumulada del coronavirus en el Cap i Casal. Con todo, ahora bien, el colectivo fallero indica en la propuesta que el evento se celebre con bandas de musica.
En cuanto al aforo de la Ofrenda, el documento señala que el acto no es especialmente complejo en este extremo, dado que este año el trayecto del desfile variará respecto a otras ediciones, de manera que mucha de las calles por las que discurrirán falleros y falleras hasta la Plaza de la Vírgen carecen de aceras, por lo que se evitará la presencia de público. En todo caso, tanto en la Ofrenda como en las recogidas de premios y los pasacalles, en caso de que Sanidad autorice su celebración, la mascarilla sería de uso obligatorio para los falleros que participen en los mismos.
Otra de las preocupaciones se debe a la incertidumbre que supone el toque de queda para trabajos como los que se hacen durante la Plantà, que acostumbra a realizarse en muchos casos de noche. En este sentido, los artistas falleros ya han avanzado que empezarán la retirada de los monumentos almacenados en Feria Valencia a partir del jueves e ir llevando a cabo el montaje hasta el 31 de agosto, realizando las tareas durante el día para cumplir con el toque de queda.
Aún así, el colectivo fallero espera que la Conselleria de Sanidad permita que los artistas falleros, que en algunos casos tienen "muchas fallas que plantar", puedan avanzar en sus trabajos "las 24 horas del día", por lo que se les permitiría estar en la calle en la franja nocturna, "como a cualquier trabajador".
Para el acto de la Cremà, la Interagrupación de Fallas plantea la utilización de sillas para que las personas que asistan puedan estar sentadas, de forma que se garantice la distancia social. Otra medida, en este caso más específica para las fallas de Sección Especial y categorías superiores, que tienen "más complicación" por la cantidad de personas que las visitan, es la instalación de un doble vallado alrededor del monumento.
En el documento propuesto, asimismo, la Interagrupación plantea que se elaboren listas con las personas que vayan a asistir a los diferentes actos falleros de cada comisión y evitar la concurrencia de personal ajeno, además de celebrar eventos como almuerzos, comidas y cenas siempre al aire libre. También una de las ideas que se baraja es que se creen 'mesas burbuja' cuyos comensales no varíen a lo largo de las fiestas.