Medio Ambiente priorizará la gestión de residuos y el problema del agua, aunque el secretario se declara "antitrasvasista"
VALENCIA.- En su estreno ante la comisión encargada de su control, el secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro dejó claro que la gestión de residuos y el problema del agua centrarán la actuación del organismo que gestiona.
El responsable de Medio Ambiente, que proviene de la rama de els Verds-Equo de Compromís, se confesó “antitrasvasista”, aunque aseguró que el Consell respetará la actual ley de trasvases y acusó al PP de querer ganar votos con la cuestión del agua, en referencia al Tajo-Segura y la llamada 'guerra del agua'. Ante los trasvases, Álvaro plantea opciones como las desaladoras y el aprovechamiento del agua fluvial, que según el representante constituye una mejor forma de gestión y su coste no es mucho más elevado que el agua trasvasada. Sobre esta cuestión hubo baile de cifras, ya que el coste del agua trasvasada sería de 15 céntimos por metro cúbico según Álvaro, algo que los agricultores estarían dispuestos a pagar “si ya pagan a 60 céntimos el metro cúbico, mientras que los populares sostenían que se multiplicaría por diez el precio actual.
Álvaro dedicó un capítulo especial de su intervención a la gestión y movilidad de recursos para el tratamiento de residuos, especialmente al cierre de la planta de Crevillent, que obliga al Consell a buscar alternativas para los deshechos de la Vega Baja. Algunas voces apuntan al traslado de las 60.000 toneladas de residuos anuales a la planta de Valencia ciudad, aunque por el momento se encargan las plantas de Elda y Xixona. Asimismo, aseguró que apostarán por el reciclaje y que no contemplan la incineración de residuos, por sus niveles contaminantes y porque desincentiva la reducción de residuos.
El secretario aseguró al inicio de su intervención que tanto Vaersa como Epsar, pese a las cuestiones jurídicas que afectan a ambas entidades públicas, serán pilares básicos de su acción. "Sin ellas iríamos cojos", afirmó Álvaro mientras explicaba que la primera entidad se haya en proceso de reestructuración para hacerla más operativa y "horizontal".
También aseguró que se restituirá la figura del director de los parques naturales y que el Consell eliminará la elección 'a dedo' de estos cargos, que pasarán a ser funcionarios de la administración, en lugar de personal eventual (de confianza), como lo eran durante el gobierno del PP y que una sentencia judicial se encargó de condenar en 2010, considerándolo "abuso de la ley".
El cambio climático, dentro de las capacidades de la secretaría, será otro de los pilares de la gestión. El Consell realizará pruebas de la recogida de basura 'puerta a puerta' (sistema polémico, puesto que no garantiza la recogida diaria de algunos tipos de residuos) y tratará de agrupar la normativa que hace referencia al fuego. Todas ellas, medidas enmarcadas en una acción que apueste por la sostenibilidad, ya que “no es una opción”, la concienciación sobre el cambio climático "más allá de las catástrofes de las películas" y una constante labor pedagógica del Consell para instaurar esta cultura.