CASTELLÓ. Las esmalteras gastan ocho veces más hoy en día que en 2020. Así lo señala la patronal Anffecc, que destaca los constantes incrementos de los costes energéticos, especialmente los del gas, "que están subiendo cada día de forma incontrolada e impredecible". Por ello, y como ya han anunciado varias compañías azulejera, la primera de ellas Pamesa (y se verán obligados a hacer todas las que no paren la producción), desde la asociación empresarial señalan que se ven obligados a repercutir estos precios a sus productos.
Esta será, de esta manera, la cuarta subida de precios que aplicarán los fabricantes de fritas, esmaltes y colorificios cerámicos en los últimos meses. Recientemente, su presidente, Joaquín Font de Mora, reconoció que durante el año pasado debieron subir en tres ocasiones los precios para perder la mínima rentabilidad posible debido a la continua escalada de costes.
Tanto es así que la Asociación Nacional de Fabricantes de Fritas, Esmaltes y Colores Cerámicos ha recordado este jueves que lleva "más de un año alertando de la caída de la rentabilidad" por los incrementos de costes "tanto de la energía como de las materias primas". En esta ocasión, ha sido el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania el que ha provocado el alza, con "una escalada de costes sin precedentes", señala Font de Mora. "Lo primero que hacemos cada día es mirar el precio del gas, para ver si podemos producir sin pérdidas", apunta el dirigente empresarial.
No en vano, la escalada es desmesurada. "El gas costaba en 2020 en torno a 11 euros el megavatio hora; en 2021 pasó a 47 y en lo que llevamos de mes estamos en 154 €/Mwh de media. Esto implica que la factura correspondiente a un trimestre, a día de hoy, nos cuesta el doble de lo que nos costaba el gas de todo el año en 2020. Es un incremento desorbitado y sin justificación alguna". Si se estos precios se mantuviesen durante todo un año, el coste se multiplicaría por ocho.
De ahí que este miércoles su patronal hermana, Ascer, solicitase a la ministra de Industria, Reyes Maroto, medidas para compensar este gas, tal y como el Gobierno está implementando (lo hará el próximo día 29) para la electricidad.
En este sentido, Font de Mora remarca los intereses que se esconden detrás de los incrementos: "No se comprende que la referencia del precio del gas en Europa al índice holandés TTF haga que un combustible que tiene un precio de coste razonable se vea sobrecargado con incrementos de este calibre, que no responden a las leyes del mercado, sino a movimientos meramente especulativos". Así, el presidente de Anffecc señala que dichos incrementos "corresponden a intereses puramente lucrativos, que aprovechan la necesidad tanto del sector industrial como de la población, que necesita el gas para la calefacción de los hogares".
Asimismo, el presidente de la patronal esmaltera señala que ya se están produciendo las primeras repercusiones en las fábricas: "Estamos teniendo que parar hornos, y aunque hemos evitado que esta situación repercuta en el empleo, de seguir así no tardarán en llegar los ERTEs, pues la situación es insostenible".
Inevitablemente, tanto el sobrecoste aplicado a su producto, como las paralizaciones de actividad, tendrán asimismo repercusiones en sus clientes, la gran mayoría de ellos productores castellonenses de azulejos y baldosas.
Desde Anffecc remarcan que los precios de sus materias primas no han parado de subir en los últimos doce meses y lo han hecho, "de media, más del 70% desde la primera mitad del año pasado". Además, para el próximo mes de abril "la previsión que tenemos es que suban un 30% más". Y es que el óxido de níquel ha suspendido su cotización en la London Metal Exchange por su alta volatilidad; el de zinc ha subido más de un 35%; mientras el zirconio ha más que duplicado su precio, como el óxido de praseodimio y el de estaño; y el óxido de cobalto ha registrado un incremento en su cotización del 77%. Y todo ello con el encarecimiento del precio del dólar, ya que el sector "importa un 70% de las materias primas cotizadas en dólar", añade Font de Mora, con lo que esto también les grava.
Asimismo, la huelga de transportes también está afectando a las esmalteras, "tanto a los costes como al suministro de materias primas nacionales; si no se resuelve en un muy corto periodo de tiempo, nos podríamos ver obligados a parar producción al no disponer de materias primas imprescindibles", concluye el presidente de Anffecc.