Lealtad institucional y ejemplaridad

Si en algo coincidimos la inmensa mayoría de los valencianos es en nuestra reivindicación por un sistema de financiación más justo y equitativo, y pese a que tanto los gobiernos del PP como los del PSOE suelen ignorar de manera voluntaria y muchas veces forzada por sus pactos con el independentismo catalán y vasco esta reclamación, hemos logrado una unidad de acción entre las instituciones políticas, empresariales y diferentes colectivos de la sociedad civil.

En los últimos años y a través de esta lucha, hemos demostrado que se puede trabajar unidos y pidiendo justicia sin crear un enemigo exterior ni criminalizarlo, sin pasar la línea del ataque frontal a las instituciones del Estado por ese maltrato financiero y de reparo al que nos someten. Por ello, y pese a que muchos consideran que nos falta garra, nos falta mostrar eso que el presidente Puig llamó “el problema valenciano”, para remarcar que aquí hay asuntos que se tienen que resolver con el concierto del gobierno central y que no pueden mirar siempre para otro lado.

El discurso cala, pero de manera muy suave y el carácter global, si es que podemos definirlo así, la idiosincrasia de nuestro pueblo, hace que no lleguemos a las manos, que nos cabreemos un rato y luego se rebaje esa tensión. Y como ya he dicho muchas veces, eso es algo más positivo que negativo, pues genera una convivencia y una sociedad mucho más sana y habitable que en muchos otros territorios de España, algunos no muy alejados geográficamente de nuestra tierra. Por ello, me gusta comprobar como valores tan importantes en democracia como la lealtad institucional se mantienen, pese a que tengo la sensación de que, a algunos dirigentes, les encantaría alterarlos o provocar alguna situación de protesta.

No creo que haya que ser muy hábil para pensar que me refiero a cómo en una semana la Jefatura del Estado en la figura del Rey Felipe VI y hoy junto a la reina Letizia visitan Valencia para estar en actos y eventos vinculados a la empresa, a la economía, a esos hombres y mujeres de nuestra tierra que además de trabajar duro y generar riqueza en la sociedad, mostrando un comportamiento ejemplar en tiempos difíciles para esos valores de esfuerzo, lucha y sacrificio; son también leales a la forma de Estado que nos dimos con la Constitución de 1978, que además de darnos el mayor período de paz, prosperidad y estabilidad, recoge una tradición monárquica que no es ajena al pueblo español.

Hoy la máxima representación de la nación española estará en un territorio del que también es Rey, pues lo es no sólo del Reino de España, sino de todos los territorios que son reinos históricos como el Reino de Valencia apoyando y dando la máxima categoría a los premiados con el Premio Rey Jaume I que son María Vallet Regí, premiada en Investigación Básica; Xavier Freixas Dargallo, reconocido en la categoría de Economía; Dolores Corella Piquer, galardonada en Medicina Clínica; Íñigo Losada Rodríguez, distinguido en Protección al Medio Ambiente; Ramón Martínez Mañez, premiado en Nuevas Tecnologías; Enrique Silla Vidal, premio Emprendedor.

Pero no sólo en ese tradicional galardón que cuenta con el apoyo de la Casa Real sino que también estarán presentes en la Noche de la Economía que organiza la Cámara de Comercio de Valencia. Un encuentro que protagonizarán empresas y personas que son motivo de orgullo para todos los valencianos por su buen hacer. Por ello creo que es bueno saber quienes son: Pulverizadores Fede (Innovación en la empresa), Cotoblau (Impulso a la internacionalización), Grupo Istobal (Excelencia del modelo de gestión empresarial), Walkerpack MPL (Empresa socialmente comprometida) y Smurfit Kappa Group (Reconocimiento a la empresa extranjera). Y finalizo destacando el reconocimiento a la trayectoria del empresario Ricardo Císcar Martínez, del Grupo Dacsa, con la Distinción a la trayectoria empresarial, una de esas empresas que forman parte del ADN de nuestra tierra y que son claramente Marca Valencia y Marca España. Sigamos trabajando con ejemplaridad y por supuesto con lealtad.