regresan con una Antología en directo
El rockabilly también sonaba en València de la mano de Blue Moon
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Hablamos con Alain Séghir, fundador del grupo de culto marsellés que desapareció del radar en 1988 y ahora vuelve a los escenarios. La capital del Turia es una de las tres ciudades escogidas para la primera gira española de su historia
VALÈNCIA. Entre finales de los 70 y mediados de los 80, la escena musical underground francesa vivió su propio idilio con los sonidos de la new wave. La oscuridad del post punk y la sofisticación de los nuevos sintetizadores dio pie al subgénero cold wave, una corriente fría y maquinal, pero intensa emocionalmente, que casaba muy bien con las inquietudes de la juventud del momento en un contexto de crisis económica y Guerra Fría. Estos “Jóvenes Modernos” estaban divididos entre la sensación de vivir al borde del abismo y la esperanza de encaminarse hacia la utopía tecnológica del futuro inminente. La cold wave tuvo especial incidencia en Francia y Bélgica, aunque muchas de sus bandas de referencia, como KaS Product o Marquis de Sade, cantaban en inglés y no ocultaban su fuerte influencia anglosajona. Aunque su centro neurálgico estaba en París, tuvo su réplica en muchas otras ciudades francesas.
Martin Dupont, considerada por muchos como la principal referencia de este subgénero, surgió en Marsella en 1980. Eran un verso suelto; un grupo difícil de clasificar debido a su componente experimental y a las fuentes de inspiración de las que bebían: desde Béla Bartók a Joy Division, pasando por Throbbing Ghristle o la música tradicional rusa o árabe. A esto se añade la inusual combinación de guitarras con saxo y clarinete que enriqueció la propuesta del grupo tras la publicación de su primer LP, Just Because (1984).
¿Qué diferenciaba a Martin Dupont de otras bandas francesas del momento? “Diría que es una combinación de varias razones: mi base musical era muy ecléctica; siempre tuve mucho interés en descubrir cosas nuevas; componía de una forma muy espontánea y emocional y quizás porque siempre hay algún detalle raro o furtivo en mis composiciones”, apunta Alain Séghir, principal compositor del grupo formado junto a Brigitte Balian y Catherine Loy, al que años después se sumaría la clarinetista inglesa Beverley Jane Crew. “Nunca tuve la sensación de pertenecer a ninguna corriente musical específica. Yo escuchaba muchos estilos de música diferente. De hecho, me sentí contento, pero sorprendido, cuando nos incluyeron en el recopilatorio Les Jeunes Gens Mödernes en 2008”, Todos ellos menos Loy están a punto de emprender la primera gira por España de su trayectoria, detenida en 1987 cuando Séghir decidió orillar la música para centrarse en su carrera como cirujano plástico.
Hablamos con él días antes del inicio de la primera gira española de Martin Dupont, que coincide con la presentación del LP Kintsugi (Minimal Wave, 2022), en el que reformulan el sonido de algunos de sus viejos temas. “Cuando grabamos esas canciones en los ochenta, yo estaba centrado en crear mis propios sonidos en lugar de usar presets, mientras que ahora uso más samples y no dudo en yuxtaponer sonidos pregrabados para obtener un resultado completamente diferente al original. Esos son básicamente los matices que se han añadido en las nuevas versiones que presentamos en el disco”.
Gracias a la alianza de dos promotoras de la escena underground -la madrileña All Waves Promotions y la valenciana Fill Lex Records-, la gira española recalará en la sala 16 Toneladas de València el próximo domingo 12 de marzo. Lo hará además con todos los miembros de la formación original, excepto Loy, e incorporado tres nuevos músicos: Sandy Casado (Rise and Fall of a Decade, Cube-Like-People), Thierry Sintoni (ex Rise and Fall of a Decade, Girls Like You) y Ollivier Leroy (Olli and the Bollywood Orchestra, The Secret Church, Contreo). El cartel se abrirá con el concierto de Tvnel -sin duda uno de los mejores representantes españoles del revival de la cold wave en España- y se cerrará con una sesión de música electrónica a cargo de Dj Orco.
Alain Séghir es un personaje peculiar: a su papel como músico y reputado cirujano plástico hay que sumarle el de inventor (fue el creador de la tarjeta Supermax para el emblemático sintetizador Yamaha DX7, considerada el invento del año por Jean-Michel Jarre). Hijo de un militar poco amigo de la bohemia que le inculcó una educación rígida y exigente, Alain se sintió atraído por la música desde edad muy temprana, aunque aprendió a componer y a tocar la guitarra y los sintetizadores de forma autodidacta. Cuando todavía era un estudiante de Educación Secundaria conoció a Catherine Loy, de la que se enamoró inmediatamente y con la que acabaría compartiendo la sección vocal de Martin Dupont. Loy le presenta a Brigitte Balian, una joven punk marsellesa que se sube al nuevo proyecto para explorar caminos menos trillados.
Entre 1980 y 1987, la banda publicó tres álbumes por los que hoy se dan patadas en el mercado de segunda mano: Just Because (1984), Sleep Is A Luxury (1985), and Hot Paradox (1987). Nunca llegó a ser un grupo de éxito comercial, pero gozó de reconocimiento entre lo más granado del post punk y la new wave del momento. Telonearon, por ejemplo, a Siouxsie and the Banshees y a The Lounge Lizards en su momento de apogeo.
Tras su separación, los miembros de Martin Dupont continuaron vinculados a la música. Brigitte Balian empezó a colaborar con el compositor Patrick Portella y Beverley Jane Crew empezó a trabajar como productora de la red de música contemporánea de Londres. Alain compuso algunas piezas para la coreógrafa Josette Baïz y los estilistas Geneviève Delrieux y Patrick Murru, antes de dedicarse por entero a su carrera médica.
Durante dos décadas, el nombre de Martin Dupont desapareció del mapa. Sin embargo, el resurgimiento de la música con sintetizadores en la primera década del siglo XX, sumada al boom de las descargas gratuitas de discos raros (y a la consiguiente labor de rescate de grupos de la new wave europea), brindó al grupo francés una oportunidad inesperada. El prestigioso sello norteamericano Minimal Wave se ofreció a reeditar su discografía. Una buena jugada, puesto que puso a la banda en el radar de artistas de renombre como Tricky, MadLib o Theophilus London, que acabaron sampleando o versionando algunos de los hits de Martin Dupont. Hay extractos de “Just because” en “Something in the way” (2014) de Tricky y en “For the Nasty” de MadLib y el “Take a look” de Theopilus London es una versión producida por Kayne West de la canción homónima del grupo francés.
“Tuve la suerte de recibir propuestas por parte de varias discográficas (la mayoría norteamericanas y francesas), pero Veronica Vasicka, la fundadora de Minimal Wave, fue la única que se desplazó hasta mi casa para explicarme su proyecto. Conectamos desde el primer momento y tuve claro que la suya era la mejor opción para nosotros y la más obvia”, explica Alain.
La labor “arqueológica” de Minimal Wave comenzó con la edición de un LP de vinilo de edición limitada en 2008 llamado Lost & Late que recopila sus temas menos conocidos. El material incluye canciones publicadas en el casete inédito Inédits ‘81-83 (1985). En 2009, todos los álbumes fueron relanzados como una caja de 4 CD por el sello francés Infrastition, y en 2018, Minimal Wave lanzó The Complete Collection: 1980-1988, una caja de 5 elepés de vinilo de 180 gramos acompañada de un folleto de 12 páginas, con portada de Peter Miles.
Tras la publicación del LP Kintsugi (Minimal Wave, 2022), la banda anunció por sorpresa una gira europea y una norteamericana. ¿Qué les motivó a dar el paso? “La que me convenció, de nuevo, fue Veronica Vasicka. Fue entonces cuando conocí a Thierry, Sandy
y Olli. Todos se mostraron entusiasmados con la idea de sumarse al proyecto, y fue así como se hizo realidad”, apunta Alain.
Las sensaciones tras los primeros conciertos en Francia han sido “increíbles”. “La emoción de nuestros fans es la misma que la de hace tres décadas”, nos cuenta. “Creo que nuestro sonido es más sólido y completo ahora, probablemente porque somos más músicos en el escenario y los nuevos miembros son más profesionales. Por otra parte, utilizamos tecnología digital cuando en nuestros inicios solo había sintetizadores analógicos con efectos analógicos, y usábamos una grabadora de carrete a carrete en lugar de ordenadores”.
Le preguntamos si en el momento de desmantelar el grupo en 1987 era consciente de estar dejando atrás un legado que acabaría reivindicándose muchos años más tarde. “En absoluto -asegura-. ¡Jamás imaginé semejante escenario! Yo hacía música por placer y con la única intención de compartirla con mis amigos. Cuando empecé a trabajar como cirujano no sospechaba que mi música acabaría regresando a mí por sus propios medios”.
Lejos de ser una anécdota en su biografía, Martin Dupont está ya planeando nuevos proyectos como banda. Un álbum con nuevas canciones y otra gira: “Esta vez por Latinoamérica y probablemente por Japón y Australia”.
“Llevaba años detrás de la banda para traerlos, y al final se ha hecho el sueño realidad”, comenta Vane All Waves, la promotora madrileña responsable de que Martin Dupont actúe por primera vez en España. “La escena underground es muy dura y se mantiene básicamente por la pasión que le ponemos algunos enamorados de la música arriesgando nuestro poco dinero”, añade.
“A Martin Dupont los conocí a raíz de la reedición que hizo Minimal Wave en 2008. Automáticamente entraron en mi maleta de discos y nunca han salido”, explica por su parte Álex Mendoza (Dj Orco), fundador de Fill-Lex Records. “Económicamente sigue siendo complicado organizar este tipo de conciertos en España, y sobre todo en València, porque el público que tenemos es limitado -lamenta-. Aunque hayamos vivido una época dorada en Valencia con los sonidos de los ochenta, siempre ha estado más asociada al EBM, el new beat, la new wave o el post punk. Que Martin Dupont gire por España es algo insólito. Únicamente en La Residencia puedes ver cosas parecidas, pero cuando necesitas llegar a un aforo mayor, la cosa se complica. La gente del 16 Toneladas nos está ayudando mucho en este aspecto”.
Mendoza opina que la diferencia entre Martin Dupont y otras bandas de la época como Trisomie 21 o Clan Of Ximox es su componente experimental. “Sobre todo porque utilizaban instrumentos clásicos, como el clarinete y el saxo. Otra cosa a destacar es el componente artístico de sus portadas, realizadas por Yves Cheynet. Me parecen sublimes”.
En cuanto a la influencia de Martin Dupont, Mendoza señala que “se ve claramente en la reivindicación de la escena cold wave y new wave de los últimos 10-15 años”. “Lo vemos en grupos españoles como Ypsilon, Fasenuova o Tvnel, y también en formaciones internacionales como Lebanon Hanover, Linea Aspera, Boy Hasher, Synth June, Imiafan y toda la onda de bandas eslovacas o rusas, como por ejemplo Molchat Doma, y por supuesto francesas como Makina Girgir, HNN y Automelodi”.
No todo está perdido para aquellos que tengan que quedarse en agosto en la ciudad. La banda de culto norteamericana liderada por Mac McCaughan actuará el 22 de agosto en la sala 16 Toneladas