VALÈNCIA. El pasado viernes 14 de Octubre a las 20:30h. se inauguró en el Colegio Territorial de Arquitectos de València la exposición Arquitecturas Vacías de Lluís Bort que apuesta por concienciar a la sociedad de la importancia de la recuperación del patrimonio y de su historia. La exposición se puede visitar desde el 14 al 28 de Octubre de 8:00 a 15:00 horas.
Arquitecturas vacías es un trabajo fotográfico sobre algunos edificios y construcciones abandonados a lo largo de todo el territorio de la isla de Mallorca. Estas construcciones, en muchas ocasiones, fueron edificadas para cumplir una función muy concreta y con el paso de los años quedaron obsoletas y olvidadas. Sin embargo, eso no quiere decir que ya no sirvan, sino que deberían tener la oportunidad de ser rehabilitadas para gozar de una segunda vida dotándolas de un nuevo uso para sus vecinos y su entorno. Este trabajo no quiere ser meramente un reportaje fotográfico, sino que quiere mostrar una solución a este problema.
Esta posible solución podría ser una colaboración entre técnicos y administración para realizar estos trabajos mediante ayudas europeas económicas como los Fondo FEDER, que proporcionan apoyo financiero para el desarrollo estructural de las economías europeas. Mediante la redacción de un Plan Director, que estructure las estrategias y las fases de intervención del edificio y unas Jornadas de Participación Ciudadana con los vecinos, donde puedan expresar sus necesidades y sentirse partícipes de estos nuevos espacios culturales para sus ciudades o pueblos, se podría conseguir darle una nueva oportunidad a cada uno de estos edificios.
Volviendo a la obra fotográfica, esta recoge diferentes tipologías constructivas, desde un hospital que abandonaron cuando se construyó uno nuevo a las afueras de Palma; a una fábrica textil en Sóller que fue uno de los motores económicos de la isla durante la Guerra Civil cuando las tropas franquistas bombardearon el núcleo industrial de Barcelona; hasta la bodega de vino más grande de la isla situada a Felanitx que después de 4 ampliaciones cerró en los años 90.
Con respecto a la técnica fotográfica utilizada, comentar que tuvo un papel muy importante a la hora de realizar el trabajo. Ya que para poder darle una uniformidad a todo el trabajo en el que hay diferentes tipologías se decidió fotografiar cada edificio durante la hora dorada (momento del día en el que el sol está muy cerca del horizonte y predominan los tonos ocres y naranjas). Y dependiendo de la orientación de cada edificio, se tuvo que realizar la fotografía a primera hora del día (este) o a última (oeste). De esta manera, cada edificio se presenta como una joya arquitectónica sobre un cielo azul intenso y degradado que permite reflejar la belleza de cada uno de ellos.
Arquitecturas vacías busca poner en valor estas construcciones que fueron muy importantes para la historia de Mallorca, y que en muchas ocasiones se sitúan en localizaciones privilegiadas, donde tendrían muchas garantías de éxito si se convirtieran en nuevos equipamientos para las ciudades. Este proyecto fotográfico empezó en 2019 y hay que señalar que desde entonces en alguna de estas construcciones se han iniciado trabajos de adecuación, que esperemos que permitan recuperar el edificio y enriquecer la ciudad con nuevas ofertas culturales.
Con todo esto, este trabajo quiere mostrar la oportunidad de rehabilitar estas arquitecturas estratégicas y abandonadas del territorio mallorquín para dotarlas de nuevos usos como museos, salas de exposiciones o casales de barrio, entre otros.
Finalmente, hay que destacar que, aunque sean edificios de Mallorca, es un claro ejemplo totalmente aplicable al territorio valenciano en el que también se encuentra edificios abandonados como la cementera de Buñol (València) o la discoteca Pirámide de Cabanes (Castellón).
Lluís Bort es arquitecto y fotógrafo de arquitectura y su vida siempre ha estado ligada al mundo de la fotografía. Esto es debido a que en su casa siempre ha habido mucha afición y él se pasaba las tardes encerrado en el laboratorio de revelado de blanco y negro, bajo la luz roja y el olor a reactivos, ayudando con todo lo que le dejaban. A medida que fue creciendo, empezó a formar parte de la agrupación de fotografía L’art de la llum de Onda. En ella realizó sus primeros concursos fotográficos, exposiciones y obtuvo varios premios a lo largo de los años.
Cuando empezó a estudiar arquitectura, descubrió una disciplina de la fotografía que aún no estaba entre sus registros. Así que empezó a formarse y a desarrollarla paralelamente con la arquitectura. Colaborar con diferentes estudios de arquitectura de prestigio le permitió fotografiar algunos de sus proyectos. De esta forma y con los años, él ha conseguido captar la esencia de los proyectos de estudios de arquitectura como el fabricante de espheras, Grupo Aranea, Tabuenca & Leache o José María Sánchez García entre otros. También tiene proyectos personales como el trabajo Arquitecturas vacías o Visió de un foraster, que actualmente tienen programadas varias exposiciones itinerantes a lo largo del territorio nacional. Con ellos busca concienciar a la sociedad de la importancia que tiene el patrimonio en la isla.