Hoy es 10 de octubre
MADRID (EFE). El Banco Popular perdió 12.218 millones de euros en el primer semestre del año después de que la entidad, ya en manos del Banco Santander, asumiera una depreciación de su cartera inmobiliaria de 3.454 millones de euros, según la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Los fondos propios de la entidad a cierre de junio se redujeron a apenas 332,32 millones, frente a los 14.543,5 millones de un año antes, al tiempo que los recursos de clientes mermaron un 27,3 %, hasta 78.745 millones, y los créditos un 18,7 %, hasta 85.343,38 millones.
"Desde el comienzo del año se ha producido un progresivo deterioro del nivel de actividad del banco con importantes bajadas de negocio, especialmente en depósitos de clientes", resume el informe, que añade que además el nivel de nueva producción de créditos ha sido especialmente bajo. A cierre de la primera mitad del año, el Banco Popular contaba con "depósitos cedidos" por parte del Banco Santander por importe de 11.219,08 millones.
La morosidad se disparó y pasó del 14,42 % de finales del primer semestre del año pasado al 21,32 % de junio de 2017, con un saldo de impagados de 20.397 millones, un 24,4 % superior que un año antes. Las provisiones para insolvencias aumentaron un 68,55 %, hasta 13.199 millones de euros.
En cuanto a los principales márgenes de la cuenta de resultados, el de intereses se situó en 734,88 millones tras ceder un 14,9 %. Los ingresos por comisiones se situaron en 246 millones, después de caer un 2 % en comparación interanual, y el margen bruto se hundió un 46,6 %, hasta 693,5 millones.
Los gastos de administración se redujeron el 15 %, hasta 503,5 millones, al mismo tiempo que los de personal lo hicieron el 23 %, hasta 278 millones, y el resultado antes de provisiones ya arrojaba unas pérdidas de 347,95 millones de euros, frente al beneficio de 574,2 millones del primer semestre de 2016. Tras el fuerte esfuerzo en provisiones, las pérdidas se elevaron a 11.296 millones, con lo que multiplicaban por 156 los números rojos de 72,4 millones de un año antes.
En cuanto a la solvencia, antes del rescate del Banco Santander, la ratio de capital Tier1 era de -3,70 %, lejos del 18,17 % que Popular había reportado a cierre de junio de 2016.