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MADRID (EP). La junta general de accionistas de Carbures, celebrada este jueves en el Puerto de Santa María, en Cádiz, ha dado el visto bueno a la capitalización de deuda por parte de varios accionistas de la empresa, entre ellos Black Toro, que alcanzará mediante este proceso una participación del 49%. En concreto, este inversor se hará con el 49% de la empresa tras capitalizar préstamos por valor de 45 millones de euros, mientras que otros cuatro acreedores harán lo propio por valor de cerca de 10 millones.
Carbures realizará una ampliación de capital por compensación de créditos con el objetivo de rebajar su deuda en 55 millones de euros y así prepararse para financiar su crecimiento orgánico. La conversión de deuda en 'equity' responde a la estrategia del equipo directivo de eliminar el lastre del pasivo, sanear la compañía y, desde una nueva plataforma, impulsar su crecimiento y consolidación.
La ampliación de capital asociada a la operación implica la emisión de 115 millones de acciones nuevas iguales a las existentes. Aparte de Black Toro, Nanotures capitalizará una deuda de 4,64 millones de euros y Neuer Gedanke, de 4,9 millones.
Rafael Contreras, fundador y presidente ejecutivo de la compañía, pasará a controlar un 9,72% del capital de Carbures, mientras que el grupo Anangu pasará del 10,92% actual a un 4,99%. En una nota de prensa, Carbures destaca que avanza en su hoja de ruta y duplica su capital social, que supera ya los 100 millones de euros, tras la aprobación de la operación de capitalización.
El pasivo de la compañía queda en 56,41 millones de euros y, según la empresa, "queda saneado de forma definitiva", con lo que Carbures partirá de "una mejor posición financiera desde la cual impulsar su crecimiento orgánico". De los 103,43 millones de euros de deuda neta a 30 de junio de 2016, a los que se sumaron 10 millones que inyectó Black Toro Capital en septiembre, se pasa a una previsión de 56,41 millones de deuda tras la ampliación de capital.
De este importe de deuda, un 47% corresponde a créditos concedidos por administraciones públicas, mientras que cerca de un 30% procede de deuda con entidades bancarias que ya se renegoció. Otro 11% de deuda viene de compra de participaciones y alrededor de un 9% corresponde a deuda con otros accionistas.
"Tras esta junta general, Carbures culmina un largo proceso de financiación de su plan de negocio del último año y medio, en el que distintos accionistas fueron dando la financiación necesaria a la compañía", señala la empresa. "Confiamos en Carbures y en el largo recorrido que va a seguir realizando a nivel industrial. Hacemos una fuerte apuesta por la Compañía y queremos demostrar que hemos venido a quedarnos por un largo periodo de tiempo", indicó el socio director de Black Toro Capital, Ramón Betolaza.
Por su parte, Contreras agradeció la confianza recibida por parte del fondo. "El peso de Black Toro Capital en Carbures proporcionará estabilidad a su accionariado y garantiza la hoja de ruta prevista por la Compañía de cara a los próximos años", señaló.