VALÈNCIA. Metrovacesa (MVC) volverá a cotizar en bolsa el próximo 5 de febrero -porque conviene recordar que abandonó el parqué español en 2013-, cuya vuelta está enfocada a los inversores cualificados, es decir, los grandes. La 'nueva Metrovacesa' debutará en una horquilla comprendida entre los 18 y 19,50 euros, lo que supone valorar a la inmobiliaria controlada por el Banco Santander y BBVA entre los 2.730 y 2.957 millones de euros, según según el folleto de la operación aprobado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los analistas de Bankinter consideran "muy elevada" que dicha valoración porque "se encuentra en una fase inicial de su crecimiento". De ahí que recomienden a los minoristas que no compren títulos de MVC en el mercado a los precios fijados para la oferta pública de venta (OPV). "Nuestra recomendación para los inversores minoristas que podrán invertir tras la OPV es no comprar las acciones a los precios fijados para la salida a Bolsa", indica el departamento de análisis bursátil de Bankinter en su análisis diario.
"A pesar de que el ciclo inmobiliario residencial es expansivo en demanda y precios, consideramos que la valoración inicial presenta escaso atractivo", indican. Como una de las razones de su recomendación señala a que el objetivo de capitalización bursátil de entre 2.730 y 2.957 millones de euros establecido para inmobiliaria es "muy elevado para una compañía que se encuentra todavía en fase inicial de su crecimiento". En este punto, el informe bursátil señala que, tal como indica Metrovacesa en su folleto de salida, la empresa no alcanzará su objetivo de vender entre 4.500 y 5.000 viviendas al año hasta 2021.
En la misma línea, estima "excesivamente ambicioso" que el rango de precios fijado para la salida a bolsa supone entre 1 y 1,1 veces el valor neto de los activos (NAV) de la compañía. A este respecto, el informe de Bankinter señala que el 13% de los suelos que Metrovacesa tiene en cartera "no están ubicados en grandes ciudades ni en destinos turísticos con mayor demanda", y que un 26% de dichos terrenos no tienen actualmente la condición de suelo finalista preparado para edificar.
Por su parte, Borja Rubio, responsable de intermediación bursátil en España de Orey Financial, considera que la salida a bolsa de MVC en este momento "tiene sentido debido al ciclo económico en el que nos encontramos y el apetito por el riesgo. Sin embargo, no vemos tan atractiva la inversión en esta compañía que pierde dinero desde hace años, pues en el mercado español ya hay otras empresas comparables que sí tienen números negros. No obstante, hay que tener en cuenta que la OPV se lanza sólo para inversores institucionales, por lo que los minoristas no podrán acceder en un primero momento".
A su juicio, y antes de invertir en MVC, "sería prudente ver qué resultados presenta y si cumple sus objetivos. En este sentido, algunos objetivos nos parecen ambiciosos como vender entre 4.500 y 5.000 al año en 2020 cuando en el boom del ladrillo vendía la mitad. La mayor parte de la cartera de Metrovacesa son activos residenciales (73%), mientras que donde creemos que hay más valor actualmente es en los activos comerciales, los cuales, sólo suponen un 27% de la cartera de esta inmobiliaria".
De cara a este rentrée MVC ha reestructurado su consejo de administración con el nombramiento de cuatro consejeros independientes, entre los que figura el exconsejero delegado de FCC Juan Béjar. Un fichaje de alto nivel con buen cartel en el sector. La inmobiliaria saldrá al mercado con una cartera de suelo de 6,1 millones de metros cuadrados de superficie, valorada en unos 2.600 millones de euros que, según sus datos, la erigen en una de las mayores propietarias de suelo del país. Estos terrenos, repartidos por 31 provincias, permitirán levantar 37.500 nuevas viviendas.