VALENCIA. La Agencia Valenciana de Turismo sigue uniendo refuerzos a su comisión de intrusismo, que se reunirá el próximo 5 de abril. La intención de la Agència Valenciana de Turisme con esta comisión es la incorporación de más entidades, como el colegio de administradores de fincas o asociaciones de promotores, así como la agencia tributaria.
Ahora, también suma a la Policía autonómica o la Federación de Municipios y Provincias. El motivo de la incorporación de la FVMP es la intención del secretario autonómico, Francesc Colomer, de buscar la colaboración de los ayuntamientos y de la policía local para la puesta en marcha de campañas contra el intrusismo. Del mismo modo, se busca vincular a otros sectores como sanidad o consumo.
“Nuestra intención es poner en marcha una estrategia muy transversal y participativa que nos permita combatir el fraude y el intrusismo desde todos los frentes, consiguiendo así una mayor efectividad de las campañas que tenemos previsto poner en marcha”, ha remarcado Colomer, quien ha subrayado también la importancia de que esta estrategia funcione “por la relevancia que puede suponer el retorno económico si conseguimos que aflore la actual economía sumergida y que se generen nuevos ingresos”. Por eso, ha insistido en que es fundamental buscar una estrecha colaboración en este tema con los ayuntamientos.
Para el máximo responsable de Turismo del Consell “la lucha contra el intrusismo tiene que ver con la defensa de un modelo basado en la profesionalidad y en la calidad de los alojamientos y servicios turísticos, así como con la búsqueda de uno de nuestros objetivos principales, que es la mejora de la rentabilidad de los negocios”. En este sentido, ha insistido en que “los valencianos no podemos ni debemos competir en precios, sino en caidad, diferenciación y valor añadido”.
Por todo ello, Colomer ha hecho hincapié en que “nuestra intención es mantenernos firmes en el camino iniciado a favor de la oferta reglada, que es aquella que respeta las normas y no supone ningún perjuicio ni para el sector ni para los propios usuarios”. Así, ha insistido también en la necesidad de concienciar a los usuarios e implicar a las asociaciones de consumidores “que pueden verse gravemente perjudicados si contratan servicios no reglados, puesto que de esta forma carecen de garantías y se arriesgan a no recibir aquello por lo que pagan”.