El Consistorio convocó un concurso para adquirir por valor de 50.000 euros viviendas destinadas a alquiler social. Tras numerosas reuniones con diversas entidades financieras, al cierre de la convocatoria ningún banco ha presentado ninguna oferta
VALENCIA. En los Presupuestos para 2016, el Ayuntamiento de Valencia contempló destinar 1,2 millones de euros para ayuda de alquiler y otro 1,2 millones para la compra de viviendas con el objetivo de solventar el problema que actualmente tiene la ciudad, un escaso parque de apartamentos destinados a alquileres sociales. Así, tal y como obliga la ley, la concejalía de Vivienda que encabeza María Oliver, convocó un concurso público para adquirir en propiedad casas situadas en el término municipal de Valencia.
Entre una de los objetivos, se encontraba el de movilizar los parques de viviendas que tienen "los grandes tenedores", es decir, los bancos. Así, para fijar el precio, además de hacer consultas con otras ciudades, tuvieron lugar diversas reuniones con las diferentes entidades financieras. En estas reuniones se les solicitó información sobre cuántas viviendas tenían, qué características reunían y a qué precio las vendían. Con esto, y tras numerosas negociaciones, desde el Consistorio concluyeron que el precio idóneo para la compra de viviendas quedaría fijado en un precio estándar de 50.000 euros, impuestos no incluidos.
Así, desde el 12 de agosto, el concurso quedaba publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) y, tanto los bancos como también particulares, podían presentar sus ofertas hasta el 26 de septiembre, fecha en la que terminaba el plazo de entrega de solicitudes.
No obstante, después del proceso de negociación y "el trabajo de meses de muchos funcionarios" para obtener la oferta más ventajosa y abrirla a la ciudadanía "para que los bancos no tuvieran beneficio frente a los particulares", ninguna entidad financiera ha presentado ninguna oferta de las viviendas que tienen en propiedad. Tan sólo 3 particulares han ofertado pisos para que sean adquiridos por el Ayuntamiento.
En este sentido, ante un posible repunte de precios con el que los bancos hubieran preferido seguir especulando, la concejal del área de Vivienda en el Consistorio no esconde su sorpresa y afirma en declaraciones a Valencia Plaza que podrían "habérnoslo dicho y hubiéramos renegociado el precio. Ha sido muy descorazonador, muy decepcionante porque son muchas horas de trabajo de funcionarios en una línea que creemos que es correcta", añadía.
Pese a todo, Oliver asegura que, pese a no haber obtenido el resultado que esperaban y, por tanto, no acercarse a paliar el problema que sufre la ciudad respecto al corto parque de viviendas sociales que tiene en propiedad, el dinero sobrante "se va a gastar igual en vivienda. Ya veremos si se suma a las ayudas de alquiler social o lo empleamos a través de compra directa hablando con inmobiliarias".
En los pliegos de condiciones, quedaba fijado que las viviendas debían cumplir ciertos requisitos para que pudiesen ser habitables por familias con hijos. Entre las once condiciones que el Ayuntamiento plasmaba se podían encontrar unos mínimos de: 2 habitaciones, que la superficie útil mínima de los dormitorios individuales no fuera inferior a 6 metros cuadrados, que se adjuntase un certificado de eficiencia energética, que la vivienda estuviera libres de enseres, en unas buenas condiciones higiénicas, habitables y accesibles, y otros aspectos como que estuvieran inscritas en el Registro de la Propiedad de la persona o empresa licitadora, libre de cargas o gravámenes y que contaran con ascensor, suministros de agua, luz y gas. En definitiva, unas condiciones para que pudieran ser ocupadas de inmediato en cuanto se formalizase la compraventa sin más gastos adicionales que los derivados de las contrataciones de suministros.
A pesar de que ninguna entidad haya concurrido, cabe señalar que las principales entidades bancarias tienen viviendas en propiedad por precios inferiores a los 50.000 euros. Por citar alguno, el banco Santander tiene 11 pisos en Valencia ciudad que oscilan entre los 37.000 y los 48.000 euros, como puede consultarse en la página inmobiliaria con la que operan. Pero no es el único, como éste también BBVA o Sabadell (52) tienen parques de viviendas por precios inferiores al ofertado por el Consistorio que cumplen, al menos, los requisitos de número de habitaciones, baños y metros mínimos de habitabilidad.