VALÈNCIA. Las posiciones cortas en Telefónica han retomado la senda ascendente y han alcanzado el 3,300% del capital, su nivel más elevado desde diciembre de 2016, según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El 9 de diciembre de 2016, las posiciones cortas alcanzaron el 3,770% del accionariado de la compañía, su nivel más elevado desde abril de 2013, cuando aparece en la CNMV el primer dato sobre posiciones cortas en Telefónica.
El pasado 1 de septiembre, las posiciones cortas alcanzaron el 2,92% del capital de Telefónica, porcentaje que se ha incrementado al 3,300% a mediados de mes. Actualmente, la empresa que más posiciones cortas tiene en Telefónica es Boussard & Gavaudan Investment Management, que a fecha de 31 de agosto tenía declaradas posiciones bajistas sobre el 1,6% del capital de la compañía.
A continuación, se sitúan BNP Paribas, que a 15 de septiembre declaró al supervisor posiciones cortas sobre el 1,030% del accionariado de Telefónica, y Och-Ziff Management Europe, que el 8 de este mes comunicó posiciones cortas sobre el 0,500%.
Desde el año 2010, la CNMV exige que se le comunique toda posición corta sobre cualquier valor cotizado español que exceda el 0,2% del capital social y hace públicas las que superen el 0,5% el capital.
La toma de posiciones cortas es una operativa bursátil que utilizan los inversores cuando prevén que el mercado va a bajar o está sujeto a mucha volatilidad. En líneas generales, consiste en pedir prestadas acciones de una entidad a cambio de un alquiler con la intención de venderlas y posteriormente recomprarlas más baratas. El precio obtenido por la venta de los títulos compensaría con creces el alquiler y la posterior compra.