El ministro de Justicia, Rafael Catalá. Foto: EFEVALÈNCIA. Las últimas caídas del sistema de notificación electrónica LexNet han colmado la paciencia de los procuradores, que no saben ya cómo enfrentarse al día a día en su relación con los juzgados con un sistema electrónico que ha demostrado ser insuficiente, inseguro e ineficiente. Ante esta situación de caos, el Colegio y el Consejo de Colegios de la Comunidad, solicita la inmediata paralización de LexNet y el regreso a la notificación y comunicaciones en papel a fin de preservar la garantía jurídica y los derechos de los ciudadanos.
La realidad es que a lo largo de este año, y especialmente en los últimos meses, el sistema de notificación está cayendo –dejando de funcionar- repetidamente y, lo que es peor, sin aviso previo a los profesionales y a los juzgados . Este hace que la comunicación en curso se quede bloqueada sin que a veces el profesional tenga constancia de ello hasta el día siguiente, que es cuando recibe el “certificado de caída”. Esta situación ha provocado que muchos procuradores y funcionarios ,se queden bloqueados en sus despacho sin poder salir para asegurarse de que todo funciona correctamente. Los profesionales y los juzgados se encuentran en permanente estado de alerta por si les llega un certificado de caída de sistema , con los consiguientes cambios en los plazos.
Para la Decana de Procuradores, Laura Oliver, “esto es un desastre de corte tercermundista. No se puede entender que uno de los tres pilares de la democracia, la Justicia, no reciba la atención y la inversión necesaria. ¿por qué no pasa esto con la página de la Agencia tributaria?. Cada año recibe millones de consultas a la vez con la declaración de la renta, y funciona perfectamente. Sin embargo, con un sistema que sólo usamos los profesionales, la cosa es bien distinta y se bloquea cada dos por tres. No hay derecho a que la Justicia sea siempre la última en recibir inversiones para modernizarse. Es una vergüenza, es como llevar un coche que no pasaría la ITV porque no le van los frenos, ni las luces, y no sabes si arrancará o no”.
El Colegio, si entrar en aspectos técnicos, achaca estos problemas continuados a la falta de previsión del Ministerio, que abrió un sistema que sólo usaban los procuradores a otros profesionales, como los abogados, sin realizar la inversión necesaria para adaptarlo y ampliar su capacidad.
La cuestión es más grave de lo que puede parecer, y no sólo afecta al trabajo diario de procuradores, sino que puede llegar a implicar indefensión y falta de garantías jurídicas para los ciudadanos. Por poner un ejemplo, ante una caída en la comunicación desde el juzgado al procurador, puede ocurrir, como así ha sido, que una de las partes reciba la notificación mientras que la otra se queda bloqueada, con el evidente perjuicio para una parte.
“No podemos aceptar la falta de garantías, y hay que dejar muy claro que recibir un certificado de caída no suple esta carencia. La Ley dice que el certificado de caída es una excepción que se contempla por si ocurre un hecho puntual, pero en la actualidad se ha convertido en norma, ante la mirada impávida del Ministro, que no da más que explicaciones vagas sin presentar un plan de actuación inmediata, creíble y definitivo. Ha anunciado unas inversiones que no sabemos para qué son, pero no nos da plazos, ni nos garantiza el sistema. Ante esta situación caótica sólo podemos pedir la inmediata paralización del sistema LexNet y el regreso al papel. Sabemos que es un paso atrás, y sabemos que nos tocará trabajar el doble, pero nuestra obligación profesional es garantizar la representación del ciudadano ante la Justicia, y ahora, tal y como están las cosas, no podemos hacerlo”, recalca Laura Oliver.
