VALÈNCIA. (EP) Los salarios pactados en convenio subieron de media un 2,36% hasta febrero, una décima más que en febrero y casi un punto por encima del promedio de 2021 (1,47%), pero lejos del IPC, cuyo dato avanzado para el tercer mes del año es del 9,8%, según datos extraídos de la estadística de negociación colectiva del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Este incremento salarial está por debajo de la subida del 3,6% acordada entre el Gobierno y los sindicatos para el salario mínimo interprofesional (SMI) y está algo más en línea con las directrices marcadas en el Acuerdo Interconfederal para el Empleo y Negociación Colectiva (AENC) 2018-2020, que planteaba subidas salariales del entorno del 2% más un punto porcentual ligado a conceptos como la productividad, los resultados empresariales y el absentismo laboral.
Este AENC, que tenía vigencia hasta el año pasado, se encuentra a la espera de que los sindicatos y la patronal actualicen su contenido para los próximos dos o tres años. De momento, ya han iniciado las negociaciones para intentar renovarlo.
Sindicatos y empresarios todavía no han puesto sobre la mesa de negociación cifras concretas sobre cuánto deberían subir los salarios el próximo año en el actual contexto de inflación, que se está viendo impulsada por el incremento de los precios energéticos a máximos desconocidos en más de 30 años.
CCOO y UGT son conscientes de que no pueden pedir alzas salariales que igualen o se acerquen a la tasa actual del IPC y han advertido de que los porcentajes que plantearán a CEOE y Cepyme en el marco de esta negociación dependerán de si las patronales están dispuestas a aceptar cláusulas de revisión que impidan pérdidas de poder adquisitivo anualmente o al final del periodo de vigencia del AENC.
Por su parte, los empresarios están llamando a la moderación de los salarios y se oponen, a priori, a establecer cláusulas en los convenios vinculadas al IPC para evitar efectos de segunda vuelta.
La mayor parte de los convenios registrados hasta marzo en la estadística de Trabajo se firmaron en ejercicios anteriores, aunque tengan efectos en 2022.
En concreto, hasta marzo había registrados un total de 1.892 convenios colectivos con efectos económicos para dicho periodo, de los que sólo 66 se han firmado este mismo año, con una subida salarial media del 2,39%. El resto, 1.826, se firmaron en ejercicios anteriores y recogen un incremento salarial medio del 2,36%. Los 1.892 convenios registrados hasta marzo daban amparo a casi 5 millones de trabajadores.
Según la estadística de Trabajo, la mayor parte los convenios registrados hasta marzo no cuentan con cláusula de revisión salarial para evitar pérdidas de poder adquisitivo. En concreto, de los 1.892 convenios contabilizados, sólo el 16% (304) contaban con una cláusula de garantía salarial y de ellos, 231 contemplan que ésta se aplique con efectos retroactivos.
Los convenios que recogen cláusula de revisión afectan a algo más de 1,4 millones de trabajadores de los casi 5 millones amparados por los convenios registrados hasta marzo, el equivalente al 29,1% del total.
Así, el grueso de los trabajadores (siete de cada diez) carecen de cláusulas de salvaguarda en sus convenios colectivos, aunque el porcentaje de trabajadores protegidos está registrando una tendencia ascendente (hasta febrero representaban el 28,7%).
En su último informe trimestral, publicado hace unos días, el Banco de España advierte de que la tendencia al alza de las cláusulas de garantía salarial que se está registrando en la negociación colectiva en los últimos meses "constituye un riesgo creciente de que se produzcan efectos de segunda vuelta en la inflación".
La institución señala que el porcentaje de convenios que incluyen cláusulas de salvaguarda salarial para 2022 ha mostrado un "aumento considerable" en los primeros meses de este año, después de haber descendido por debajo del 20% en los últimos años.
Además, apunta que los convenios ya acordados para 2023 presentan un aumento adicional de la incidencia de las cláusulas de garantía salarial hasta casi el 50% de los trabajadores con convenio vigente para dicho año.
En este sentido, ha advertido de que, en la medida en que este tipo de cláusulas suponen un ajuste automático de los salarios a la inflación pasada, "su mayor incidencia conlleva un aumento del riesgo de que eventualmente se materialice una espiral de incrementos de salarios-precios que podría tener efectos muy nocivos sobre la actividad y sobre el empleo en un horizonte de medio plazo".
Del total de convenios registrados en los tres primeros meses del año, 1.458 eran de empresa, con efectos sobre 324.891 trabajadores y una subida salarial media del 2,48%, mientras que 434 eran convenios sectoriales y daban cobertura a 4,6 millones de trabajadores, con una subida salarial media del 2,35%.
La jornada media pactada en convenio se situó hasta marzo en 1.746,5 horas anuales por trabajador (1.708 horas en los convenios de empresa y 1.749,2 en los convenios de ámbito superior).
De los 1.892 convenios registrados hasta marzo, un total de 85, el equivalente al 4,5%, contemplaba congelación de sueldos, mientras que el 28,9% de los convenios recogía una subida salarial superior al 3%, siendo la media del 5,75%.
El 60,3% de los convenios se mueve en subidas salariales medias que van desde el 0,5% hasta el 2,5%. Los convenios registrados hasta marzo con alzas salariales superiores al 2% llegan al 40,5% del total. La estadística no recoge ningún convenio con un recorte salarial, a diferencia de 2021, cuando tenía contemplados dos convenios de esta naturaleza.
La estadística de Trabajo revela además que en el primer trimestre se registraron 187 inaplicaciones de convenios, un 5,5% menos que en los tres primeros meses de 2021.
No obstante, estos 'descuelgues' afectaron a más trabajadores, un total de 7.563, frente a los 4.972 afectados hasta marzo del año anterior (+52,1%). El 'descuelgue' de los convenios supone la revisión de las condiciones laborales en las empresas.