Los Sorolla de Cuba se quedan en La Habana "por la situación internacional"

VALÈNCIA. Parece que la telenovela de los Sorolla de Cuba vive un punto y aparte que podría ser también un punto y final. Ayer, en la presentación de la futura exposición inmersiva Sorolla. A través de la luz, que se podrá ver en Fundación Bancaja a partir del mes de octubre. En la sección de esta muestra que recoge algunas obras originales inéditas hasta ahora en València se sumarán préstamos de la Hispanic Society o el Museo Sorolla. A esta exposición se le sumarán otras, también con préstamos de instituciones y colecciones privadas… Pero las que más se esperaban no llegarán (de momento).

Carmen Amoraga, Directora General de Cultura y Patrimonio, confirmó en la rueda de prensa que el proyecto de traer las obras de Sorolla que tiene en su poder el Museo de Bellas Artes de Cuba está en punto muerto: “La situación internacional ha hecho que, habiendo tenido muy avanzadas las negociaciones, el gobierno cubano haya decidido poner freno a proyectos de colaboración como este”.

Según confirman fuentes oficiales a este diario, a pesar de que se fue avanzando y había buena sintonía, hubo un cambio de criterio que coincidiría con la tensión diplomática de Cuba con Reino Unido a raíz de la reclamación del pago de una deuda por parte de un fondo buitre que el país entiende como “ilegítimo”. Según explican dichas fuentes, aunque no ha habido una respuesta oficial en este sentido, sí que parecen encajar los dos hechos.

En todo caso, Amoraga no quiso siquiera prever ningún plazo de reactivación, dando a entender que el proyecto estaba en stand-by hasta nuevo aviso.

Fue en 2016 cuando tuvo lugar la primera expedición, con Ximo Puig haciendo el gran anuncio. En 2019 parecía todo encauzado, y, según explicó ayer Amoraga, el coronavirus “retrasó todo”. Ya en 2022 este diario publicó que la treintena de cuadros proyectados en un primer momento se verían reducidos significativamente por la judicialización en la cesión de derechos, pero que en todo caso, las negociaciones para traer una decena de ellos estaban muy avanzadas.

Un año después, Amoraga confirma que desde enero de 2023 —año en el que se celebra el Año Sorolla, la efemérides que se quería aprovechar para la llegada de estos cuadros—, el proyecto ha quedado en punto muerto y sin visos de que se reactive.