VALÈNCIA. Llega la hora de que el IVAM empiece a hacer las maletas para mudarse (parcialmente) a un Centre d’Art d’Alcoi (CADA) donde tendrá que compartir casa y gastos. Sus compañeros de piso: la Fundación CAM y el ayuntamiento de la localidad. El conseller d’Educació, Investigació, Cultura i Esport, Vicent Marzà, firmó ayer el protocolo de inicio de los trámites para la reapertura del CADA, que permanece cerrado desde 2011, un acuerdo previo al convenio definitivo con el que tanto la conselleria como la fundación, representada por su presidente Luis Manuel Boyer, y el ayuntamiento, con su alcalde Antonio Francés a la cabeza, dan por iniciado el proceso para la confección de la subsede de la pinacoteca dirigida por José Miguel G. Cortés. Subsede parcial, eso sí, pues el primer borrador de convenio establece un reparto equitativo del espacio entre las partes participantes, con lo que el centro de arte será la suma de las tres propuestas.
De esta forma, la propuesta de convenio establece que la Fundación CAM se quedará con la planta baja del edificio; el IVAM con la primera y el Ayuntamiento Alcoi con la segunda, que destinará a fines sociales y culturales. Cabe recordar que actualmente los fondos de las fundación están custodiados por el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA), donde ocupan un destacado lugar desde 2011, cuando los problemas financieros de la caja de ahorros derivaron en el cierre del CADA. Con el anuncio de la creación de la subsede del IVAM ya expresado por el President de la Generalitat, Ximo Puig, fue este mismo año cuando la fundación llevó una parte importante de sus fondos al Centre del Carme, en el contexto de la exposición Discursos premeditados, dedicada a la promoción de la colección privada. Durante su presentación, el propio Marzà ya afirmó que esta suponía “la mejor exposición que tendremos en València en 2017”.
En este caso la Fundación CAM pasa a ocupar una de las plantas, quedando otra para el IVAM. Según se deriva de esta propuesta de convenio, la planta primera será la subsede del museo propiamente dicha, siendo la pinacoteca la que asumirá su dirección y gestión, así como la confección de la programación. Se espera que el museo valenciano genera para su subsede entre dos y tres exposiciones temporales al año; una exposición basada en la propia colección del IVAM por ejercicio y entre dos y tres muestras al año de artistas jóvenes. Del mismo modo se creará un programa de actividades propio que no debe suponer un beneficio económico. “Este edificio contará con tres espacios vivos que se interrelacionarán en sus actividades haciendo de este un verdadero motor de la vida cultural alcoiana”, indicó Vicent Marzà al respecto de la firma del protocolo, en la que instó a genera un centro cultural, museístico y artístico “de primer orden”.
Por lo que respecta a las obligaciones económicas, este borrador de convenio, estipula que sería la Fundación CAM la que asumirá las actuaciones de reparación y adecuación del inmueble con una inversión máxima de 700.000 euros a realizar en el presente ejercicio, mientras que cede dos de las plantas del edificio durante el termino de vigencia del convenio –de cuatro años-, una cesión valorada en casi 313.000 euros. Será el Ayuntamiento de Alcoi el que, a través de medios propios o de terceros, preste los servicios generales necesarios para el funcionamiento del centro, como la seguridad, limpieza o distintos servicios de mantenimiento. La aportación que el borrador prevé para este ejercicio 2017 por parte de la Fundación y el IVAM sería de 250.000 euros y 400.000 euros respectivamente.
"Este edificio estaba fuera del consumo real de los ciudadanos y ahora entre todos haremos que sea un centro de vida", afirmó ayer Ximo Puig. "La Fundación Caja Mediterráneo tiene un importante patrimonio cultural e inmobiliario, entre el que destacan obras de arte, documentos históricos, legados y grandes centros culturales que queremos poner a disposición de la ciudadanía de Alcoi y de todo nuestro ámbito de actuación”, destaco Luis Boyer durante la firma del acuerdo que establece las bases para iniciar el trámite del futuro convenio que regirá el funcionamiento del CADA. "Hoy comienza a escribirse la nueva historia del CADA, que volverá a convertirse en un centro cultural de referencia de las comarcas centrales".
Fue en diciembre del año 2010 cuando la Caja de Ahorros del Mediterráneo, con la colaboración de la Conselleria de Cultura, inauguró en el inmueble un gran espacio cultural bajo la denominación de Centre d'Art d'Alcoi. Durante nueve meses, el edificio albergó importantes exposiciones de artes plásticas, aunque acabó cerrando sus puertas en 2011 a causa de la crisis de la CAM y de su posterior desaparición. Entonces, el edificio pasó a ser propiedad de la Fundación CAM, habiendo permanecido cerrado desde entonces. El espacio permaneció dormido hasta el anuncio de diciembre de 2016, cuando Puig anunció su reconversión en subsede del IVAM.
“La decisión de la Generalitat de convertir el CADA en subsede del IVAM le pone fin a una situación anómala, que había privado a la localidad de una infraestructura cultural de primer rango, devolviéndole a la ciudad un elemento central de su patrimonio y situándola en la vanguardia artística, con la instalación de una institución valenciana de alto prestigio internacional en materia de arte contemporáneo”, comunicaron desde la Generalitat Valenciana entonces. Construido a principios del siglo XX, el CADA albergó las oficinas centrales del Monte de Piedad de Alcoi, un inmueble diseñado por el arquitecto Vicente Pascual, alumno de los grandes maestros modernistas catalanes de principios de siglo. Se trata de una pieza arquitectónica cargada de valores simbólicos para los alcoyanos, que la consideran como una muestra de una de las etapas más brillantes de la historia de la ciudad y de su capacidad para generar proyectos propios.
El museo pone fecha a la retirada de las obras de arte instaladas, que incluyen piezas de Miquel Navarro o Andreu Alfaro, y rehace el proyecto original de jardín
El Belles Arts lleva obras de Ribera al Petit Palais de París mientras que la Fundación Per Amor a l'Ar afianza su relación con el Thyssen