VALÈNCIA. Emprender se ha convertido en un estilo de vida, en una actitud para abordar los problemas y poco a poco los niños empiezan a mostrar sus opiniones a una edad más temprana. No se trata de darles responsabilidades, sino de que den su opinión, libre de estereotipos e influencias.
De eso trata 'Marina Genius Lab', un semana de retos emprendedores para niños donde tendrá que construir la maqueta de su València soñada. Este evento se desarrollará del 26 al 30 de junio para niños de entre 8 y 12 años en la base de la aceleradora Innsomnia situada en la Marina de la ciudad.
Este martes realizaron la presentación del proyecto el CEO de Innsomnia, Francisco Estevan, la directora de Chiquiemprendedores, Ana Carrau; el director estratégico del Consorcio València 2007, Ramón Marrades, y la concejala de Desarrollo Económico Sostenible en el Ayuntamiento de València, Sandra Gómez.
Organizada por Chiquiemprendedores, la escuela de verano se desarrollará de 9 a 14 horas a lo largo de la última semana de junio y se trata de un programa educativo basado en la superación de retos que busca que los participantes desarrollen sus habilidades comunicativas y digitales, pero también una serie de competencias emocionales como la capacidad de resiliencia. En esta edición se añade el reto de construir una maqueta en la que los niños muestren su propia versión de la ciudad.
El proyecto se centra en desarrollar en los más pequeños habilidades transversales basadas en el espíritu emprendedor. Basa su metodología en las fórmulas de emprendimiento e innovación que utilizan empresas e instituciones en el entorno real, contando con ellos como un factor de inspiración y motivación fundamental para la consecución de retos.
Los retos que se plantearán abordan servicios, proyectos o productos que los niños, acompañados de monitores cualificados y 'coaches', tendrán que solventar a través de metodologías de innovación. Con ello se busca "potenciar la creatividad".
Además, los coaches plantearán determinadas cuestiones para que los niños, a través de estrategias como el 'Design Thinking', pongan en común sus ideas y las desarrollen en relación a materias como la tecnología y telecomunicaciones, entorno natural, recursos o movilidad en grupos de máximo seis personas.
"Los retos de chiquiemprendedores llegan a un nivel muy alto y muy real con todo un ecosistema de empresas, emprendedores e instituciones volcado en ayudarles a resolverlo", señalaba Ana Carrau, fundadora y promotora del proyecto, que este año suma el apoyo de la Diputación de Valencia, Pinturas Isaval, Chic-kles, La Pinada, Embutidos Martínez, y Nunsys-Monrabal.
Por su parte, Gómez destacó la "gran capacidad para imaginar ideas creativas y situaciones innovadoras" de los niños y ha puesto en valor una iniciativa en la que se les ayuda a "desarrollar su talento y a tener confianza para alcanzar sus metas". También ha reforzado su compromiso con el proyecto y ha asegurado que el Ayuntamiento colaborará en próximas ediciones con el objetivo de que la iniciativa "se amplíe".
Además, apuntó que el juego es una de las maneras "más efectivas para adquirir conocimientos y desarrollar habilidades". "Empezar a una edad temprana a fomentar estas facultades es fundamental para consolidar la cultura del emprendimiento y convertir València en una fábrica de talento" y ha valorado que la actividad se desarrolle en un entorno "en que el consistorio quiere asentar un ecosistema vinculado al emprendimiento".
Estevan destacó que pensar en la base de la aceleradora como un lugar lleno de niños e innovadores es "ilusionante". "Queríamos conectar a niños con las startups para que pasen cosas", aseveró.
Marrades destacó que tendrán "la posibilidad de imaginar la València que quieren, sin límites" y que la ciudad necesita "gente pequeñita pensando en grande".
