Protesta del sector arrocero por las "masivas importaciones". Foto: Unió LlauradoraVALÈNCIA (EP). Más de 100 arroceros y 30 tractores de las organizaciones profesionales agrarias de la Comunitat Valenciana (La Unió Llauradora, AVA-Asaja, Asaja Alicante, UPA-PV y CCPV-COAG) han realizado un acto de protesta sectorial en la localidad de Algemesí, municipio de la Ribera Alta, ante la "desastrosa situación comercial" del sector arrocero valenciano por las "masivas importaciones procedentes de terceros países".
Con este acto las organizaciones agrarias retoman el calendario de movilizaciones que iniciaron a finales de enero y que hasta finales de febrero contó con cuatro actos conjuntos de protesta a lo largo de las tres provincias, según ha informado La Unió Llauradora i Ramadera en un comunicado.
La protesta ha tenido lugar en la entrada de la empresa Arroz Sos-Herba Ricemills, S.L.U., del grupo Ebro Foods, situada en la carretera CV-42 (kilómetro 3,5) en el término municipal de Algemesí, donde las entidades agrarias han cocinado una paella con arroz valenciano para denunciar las importaciones de las empresas arroceras.
"El objetivo es que los consumidores compren arroz valenciano para comer sano y seguro, potenciar la economía y salvar los humedales valencianos de los que depende el cultivo del arroz", han señalado las entidades convocantes, que han denunciado que, durante las últimas semanas, se ha producido "una gran entrada" de arroz "procedente de los países asiáticos e importado por empresas de la Comunitat Valenciana".
Así, han criticado que la importación llegue en un momento donde "no hay contratos de compraventa" y los almacenes continúan "llenos de arroz valenciano de la pasada campaña". Esta práctica de importaciones de las grandes empresas, han criticado, pretende "bajar el precio del arroz valenciano". En este sentido, los arroceros han protestado contra las políticas agrarias europeas en el sector ante la "falta de reciprocidad" en los acuerdos comerciales suscritos por la Unión Europea con países terceros.
"A diferencia del arroz europeo que cumple los máximos estándares de calidad, Myanmar y Camboya, por ejemplo, usan productos químicos nocivos para la salud, que están prohibidos en la UE, cultivan de manera insostenible para el medioambiente y vulneran los derechos humanos", han denunciado los arroceros.
Asimismo, han criticado que las grandes empresas arroceras "no especifiquen en los paquetes de arroz el país de origen". "Algunas de ellas venden arroz asiático como si fuera valenciano, pues indican en la etiqueta únicamente el distribuidor local e incluso fotos identificativas de la Comunitat Valenciana, lo que arruina a los productores y engaña a los consumidores", han apuntado.
El secretario general de La Unió, Carles Peris, ha indicado que "el arroz valenciano sigue almacenado sin vender, mientras llegan casi 40.000 toneladas de importaciones masivas de terceros países". "Queremos que se reduzcan las importaciones y se etiquete el origen del arroz de estas grandes empresas para no engañar a los consumidores, ya que no sirve que ponga envasado en Valencia, sin especificar luego el origen", ha continuado.
El representante de Ava-Asaja, Miguel Minguet, ha denunciado que "al consumidor se le hace pasar arroz asiático por valenciano y eso no es justo". "Nuestro arroz tiene una seguridad alimentaria que no tiene el de fuera, se nos prohíbe, por ejemplo, el uso de productos fitosanitarios que a otros les permiten", ha sostenido y ha insistido en que "hay que poner el origen en los paquetes de arroz porque ahora casi nadie lo hace y se les da gato por liebre a los consumidores".
