VALÈNCIA. 26 empresas son finalmente las que aspiran a hacerse con el contrato para la remodelación definitiva de la Plaza del Ayuntamiento, uno de los grandes proyectos de urbanismo que promueve el consistorio y, en consecuencia, también uno de los más anticipados por los vecinos y vecinas de la ciudad. Ahora bien, son muchas las cuestiones que la adjudicataria tendrá que abordar y resolver dentro de su propuesta: qué pasará con las líneas de autobús que ahora mismo atraviesan el enclave, cómo encajar los identificativos puestos de flores y, también importante, cómo adaptar el entorno a la fiesta más grande de la ciudad: las Fallas.
Y es que, no hay que olvidar que la Plaza del Ayuntamiento es el punto de referencia en el que se suceden algunos de los eventos más prominentes del calendario fallero, como por ejemplo las mascletàs. Detalle que no han pasado por alto las empresas que compiten por el contrato. Así, durante esta segunda fase de elaboración y presentación de propuestas, muchas son las preguntas que han trasladado al Ayuntamiento para informarse al respecto: desde la forma que tendría que presentar el recinto reservado para los disparos, hasta qué pavimento sería el más apropiado para soportar la fuerza de los terremotos terrestres. Todo ello con el objetivo de que el proyecto se adapte y cumpla las expectativas falleras.
En este sentido, tal y como se podría esperar, una de las dudas más comunes tiene que ver con el tamaño ideal del recinto. A lo que el consistorio respondía: se considerará suficiente con que el espacio reservado para el disparo de la mascletà "sea equivalente" al que presenta en la actualidad. Esto es, 2.250 metros cuadrados para la zona estrictamente de fuego y luego otros 30 metros de perímetro de seguridad, en la que no se podrán ubicar los espectadores. Ahora bien, y aunque recomendaba cautela, el Ayuntamiento también abría la puerta a revisar las dimensiones siempre y cuando estas "tengan coherencia técnica" con el resto del proyecto.
Asimismo, otro de los puntos que también llama la atención es que el área para mascletàs podrá ser cambiada de ubicación dentro de la plaza. Algo que, de producirse finalmente, modificaría no solo la fisionomía del enclave sino también los actuales puntos de privilegio. Y es que, variar de manera significativa el sitio de los disparos podría alejar la mascletà de la posición preeminente que ocupan ahora mismo el balcón del Ayuntamiento o, por ejemplo, el recién adquirido edificio de Correos por parte de la Generalitat Valenciana.
Por su parte, también la forma del espacio para las mascletàs ha sido objeto de duda por parte de las empresas. De hecho, una de ellas preguntó si era necesario mantener la forma trapezoidal que presenta en la actualidad, a lo que el consistorio respondió que no. Y, finalmente, entre las respuestas emitidas, el Ayuntamiento también añadía otro punto importante: el área deberá ser fácilmente despejada de mobiliario urbano para poder proceder al disparo durante los días de Fallas, por lo que no se recomienda bajo ningún caso la colocación de elementos permanentes. Especialmente, árboles. Aunque fuera de la zona de fuego sí se podrá mantener la vegetación.
Incluso el tipo de pavimento ha llegado al buzón de preguntas. En este sentido, una de las empresas requirió recomendaciones sobre el material que mejor se podría adaptar a los actos de la pólvora. A este respecto, el consistorio respondió con un estudio que se llevó a cabo en el año 2002, cuando se procedió a la repavimentación del entorno. Así, en aquel momento, se realizó una prueba con hormigón impreso, pero se observó que se fisuraba, de modo que el material no es recomendable.
Ahora mismo, y según se desprende de la respuesta, el suelo de las mascletàs está compuesto piedras de granito de 18 centímetros de espesor, que sí que soporta los disparos. Así, el material no es obligatorio pero sí que entra dentro del rango de los más recomendables.
Al margen de las celebraciones falleras, las empresas que aspiran a ganar el concurso también se han preocupado por otros elementos identificativos de la Plaza del Ayuntamiento, como la fuente y los puestos de flores. Con respecto a la primera, el Ayuntamiento ha determinado que será necesario mantenerla dentro de la plaza, por su valor patrimonial, aunque sí que será posible cambiarla de sitio e incluso introducir modificaciones que realcen sus atributos.
Por otra parte, los puestos de flores también se podrán mover por la plaza. De hecho, uno de los principales retos será dotarlos de mayor visibilidad, tanto en cuanto a ubicación como a diseño y funcionamiento. En este sentido, el consistorio prohíbe reducir su número -13 en la actualidad- pero sí que abre la posibilidad a que se puedan instalar más.
Cabe recordar que el concurso para la remodelación definitiva de la Plaza del Ayuntamiento se encuentra ahora mismo en su segunda fase. Es decir, la de presentación de ideas, que tiene como plazo hasta el próximo 4 de abril. Antes de esa fecha, las 26 empresas participantes tendrán que remitir al consistorio sus propuestas genéricas de diseño para el entorno. Y, de esos proyectos, el Ayuntamiento elegirá entre 3 y 5 finalistas para pasar a la siguiente fase.
Según explicó la concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, estos finalistas tendrán un nuevo plazo de 45 días para presentar un anteproyecto más elaborado con su propuesta de remodelación. Aunque, independientemente del resultado, todos ellos recibirán un premio de 9.800 euros por el trabajo extra realizado. Así, finalmente, de este grupo saldrá el ganador definitivo, que será el que ejecutará su idea y recibirá otros 359.000 euros para la redacción definitiva del proyecto. Unas obras cuyo presupuesto máximo se ha fijado en 8,6 millones de euros y que previsiblemente no empezarán hasta 2023.