VALÈNCIA. El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha defendido este jueves las partidas reivindicativas que el PPCV y Vox han incluido en los Presupuestos de 2024. Las ha querido diferenciar, eso sí, de las que introdujo el anterior Consell del PSPV, Compromís y Unides Podem, que en su opinión eran totalmente ficticias a diferencia de las suyas.
"El Botànic confundió la infrafinanciación con una chequera", ha afirmado el dirigente popular durante una conferencia en Fórum Europa Tribuna Mediterránea a la hora de criticar la partida de 1.336 millones de euros para compensar la infrafinanciación autonómica por el retraso en la reforma del sistema que metía la izquierda en las cuentas. "Ahora se han acabado los engaños. ¿Cómo vamos a pedir un nuevo sistema mintiendo?", se ha preguntado.
Esos ingresos se han eliminado de los Presupuestos de 2024, en los que aun así se han dibujado otros cuya procedencia no está asegurada. Para Mazón, se trata de una "reivindicación de facturas que se nos deben" y, ha indicado, donde van a "pelear" es en la "gestión del cobro en tesorería".
En su opinión, una cosa es pintar ingresos ficticios y otra "reivindicar un dinero que se nos debe en base a un sistema previamente establecido". "Tenemos que poder acreditar nuestra reivindicación diciendo la verdad. Y lo irresponsable sería no emitir factura a quien nos debe dinero", ha apuntado.
El presidente de la Generalitat se ha referido así a que las cuentas del próximo año incluyen, de un lado, la deuda que la Generalitat le reclama al Ejecutivo central por la atención sanitaria a pacientes desplazados, el conocido como Fondo de Garantía Asistencial (Foga). El Botànic la incorporó en sus presupuestos y el PP y Vox han decidido mantenerla. De hecho, se incrementa de 800 a 926 millones. El Gobierno de Sánchez solo reconoce una deuda de 80 millones, menos de una décima parte.
De otro lado, figura una partida de 463,72 millones bajo el enunciado "Transferencia compensación recaudación IVA e IEE". Según explicaron desde la Conselleria de Hacienda, corresponde a una compensación por la reducción de ingresos en la Comunitat Valenciana a raíz de la reducción del IVA de la electricidad y del Impuesto sobre la Electricidad desde mediados de 2022. Se trata, indican, a una minoración de ingresos que afecta a las autonomías y la valenciana ha presentado una reclamación administrativa.
En concreto, se ha planteado un requerimiento previo al Gobierno de España –que ya ha sido enviado– a la espera de que compense a la Generalitat con esas cuantías. La petición al Ejecutivo central consiste en se anule o revoque la liquidación definitiva del sistema de financiación autonómico de los ejercicios en los que ya se aplicó la rebaja fiscal con otra liquidación sustitutiva en la que se compute el dinero que la Comunitat ha dejado de ingresar por la bajada de impuestos. Bajada que, por otro lado, fue solicitada por el propio PP a nivel nacional. Que se sepa, el Ejecutivo de Pedro Sánchez no tiene ninguna intención de compensar a las CCAA por esas rebajas fiscales que este año se han extendido a los alimentos básicos.
Además de todo ello, el Consell ha lanzado un órdago al Gobierno al incluir en los Presupuestos de 2024 un déficit del 0,3%, frente al 0,1% establecido por el Ejecutivo de Pedro Sánchez en el Plan Presupuestario de 2024 enviado a la Comisión Europea el pasado 15 de octubre.
Como adelantó Valencia Plaza, el Ejecutivo que preside Mazón ha hecho caso omiso a dicha previsión enviada a Bruselas y ha elaborado el proyecto de Presupuestos de 2024 con un déficit previsto idéntico al de 2023, el 0,3%, lo que equivale a 431,9 millones de euros. Es decir que la Generalitat contará el año que viene con 288 millones más de gasto presupuestado del que tendría si se hubiera ajustado al 0,1% comprometido por el Gobierno ante la Comisión Europea.
El presidente de la Generalitat también ha anunciado un plan de choque para el pago a los centros sociales que están al borde de la quiebra y más ajustes en el sector público. Aunque en el presupuesto ya se ha contemplado un recorte, se trata de uno menor. El grande, previsiblemente, llegará a través de una ley en los primeros meses de 2024 y afectará a fundaciones y sociedades donde el PP y Vox consideran que existen duplicidades. La supresión y fusión de entidades es algo que se prepara ya desde el Consell para lo que denominan "optimización del sector público".
Mazón ha avanzado también que se acentuarán las mesas de diálogo social con patronales y sindicatos en unas negociaciones que coordinará la Vicepresidencia segunda del Consell, Susana Camarero –también titular de Igualdad y Servicios Sociales–, así como la incorporación de hasta 1.500 millones de euros, la mayoría de fondos europeos, al presupuesto correspondiente a infraestructuras.
El presidente de la Generalitat ha reiterado que existe "una excepcionalidad valenciana" en la financiación autonómica y que, si bien no le parece serio condonar deudas desde el Estado a las comunidades, si se pone en marcha una quita o condonación se debe empezar por la Comunitat Valenciana.