Moda en los museos

VALÈNCIA.- El 18 de mayo es el Día Internacional de los Museos. Si Duchamp fue capaz de colgar un urinario en 1917 y en 2004, fue declarada la obra de arte más importante del siglo XX por delante de Las Señoritas de Avignon y el Guernika de Picasso o el díptico Marilyn de Warhol, la moda se ha ganado por derecho propio un lugar en estos espacios. En estas páginas enlazaremos moda y arte con la colaboración de un experto en la materia: José Luis Pérez Pont, director del Centre del Carme.

La marca valenciana Caretes ha creado una colección dopamina denominada Folklore, una apuesta por los pompones, los flecos, las plumas y por el Color.

«La suela de caucho negro me remite a las ruedas de un autobús y por los colores de los pompones, en concreto, a los autobuses de la EMT que el artista Daniel G. Andújar intervino para una exposición en el CCCC durante 2018 dentro de su lema “Democraticemos la Democracia” en su proyecto Technologies to the people» afirma el director del Centre del Carme.

«Las prendas en bloques oscuros me hacen evocar la serie Tránsito (1987-1988) que el Museo Patio Herreriano expuso en 2019 de la artista Ángeles Marco, fundamental para entender la transformación de la escultura en España a finales del siglo XX». Así se refiere Pérez Pont a estas blusas en punto Milano con cuello alto y hombro regular y manga larga con aberturas laterales. Anita F. Ruzafa tiene esta prenda y otras de colores divertidos en la calle Literato Azorín.

«El bolso me ha traído a la mente a la performer Miss Beig, una parodia del sistema del arte y la estética con un trasfondo crítico sobre el consumismo realmente mordaz”. Esta comparación la hace el experto en arte sobre un Zatchels, una marca de británica de bolsos y artículos de piel disponibles en una gran variedad de colores y acabados. Cada bolso está hecho a medida y a mano bajo pedido. En Chatting PICS los hay en 9 colores.

«Los dorados me recuerdan al artista austríaco Gustav Klimt, uno de los máximos representantes del arte vienés de finales del siglo XIX. Su pareja, la diseñadora de moda Emile Louise Flöge, lo introduzo en las incrustaciones de oro e influyó en sus pinturas». Y si de moda hablamos, nosotros saltamos dos siglos y de Viena a València para presentar piezas de joyería únicas donde prima la sencillez y la pureza de la geometría. Todos los pendientes están bañados en oro 18k y en plata. @marzo.jewels

«La fotografía de los niños, supongo que por el gesto, el tipo de cabello y el gorro me ha recordado a una pintura de Sorolla titulada El pie herido de 1909». El viaje pictórico del director del CCCC es obra de la joven emprendedora, Kesia Aparici, quién ha conseguido unir sus dos pasiones: los niños y la moda en una céntrica tienda de ropa infantil en Alzira.

«El collar azul me transporta a aquellas joyas íntimas de Picasso, que no llegó a considerar arte propiamente, que realizaba para regalar a familiares en 1950». Este recuerdo del director del Consorcio de Museos en realidad compara joyas con talcos de gafas que el proyecto ReÓptica pretende reutilizar y reciclar en piezas de bisutería como collares, pulseras o pendientes.

Han echado mano de reconocidas profesionales valencianas del diseño y la economía circular como Mariola Marcet, Natxa González o Rosa Montesa para crear estas piezas.