Mompó se duplica como 'candidato' en localidades clave mientras el PP decide sus cabezas de lista

VALÈNCIA. La degradación de las cuevas de Paterna, la falta de inversiones en el castillo de Sagunt, la reclamación de una mejor comunicación ferroviaria en Gandia… El presidente provincial del Partido Popular en la provincia de Valencia, Vicent Mompó, se está prodigando en reivindicaciones locales en municipios con un peso decisivo en la demarcación provincial.

Sus acciones tienen, entre otras, dos finalidades, sembrar marca PP con exigencias que gozan de amplio predicamento en la sociedad de ese municipio y suplir, con su presencia y con ese impulso mediático, la falta de una candidato claro a las alcaldías de ciudades como las antes citadas. Son tres de las más populosas de la provincia tras la capital.

La cuarta, Torrent, sí que cuenta con una aspirante a alcaldesa definida para la dirección provincial a falta de la ratificación de la autonómica, que es quien tiene la competencia en las listas electorales de municipios de más de 20.000 habitantes. Amparo Folgado, la portavoz y presidenta del PP local, cuenta con el respaldo de Mompó y de su equipo, que también la han acompañado cuando lo ha requerido.

No obstante, la situación resulta muy diferente en Paterna, Gandia o Sagunt. El PP se halla todavía muy lejos de disponer de un candidato en los tres. Anda buscando la opción adecuada. En un caso, porque se postulan varias alternativas; y en los otros, porque no existe una clara.

El caso de Paterna

En Paterna, hace poco más de una semana Mompó, alcalde de Gavarda, enarboló uno de los carteles con el lema ´Salvem les coves´ y participó en un acto reivindicativo con la Asociación de Vecinos de las Cuevas de la Torre. Le acompañaba la presidenta local, María Villajos. En el entorno de las citadas grutas, con el torreón emblemático paternero de fondo, el presidente provincial del PP denunció la “lamentable la desidia del Ayuntamiento, de la Generalitat y de la propia Diputación con el entorno protegido de las cuevas de Paterna, que además de patrimonio cultural, declarado Bien de Interés Cultural en 1971, son un símbolo para el municipio”.

En Paterna el PP se está moviendo sin un candidato a la vista a corto plazo y con las prisas que suponen que quede menos de un año para las elecciones de mayo de 2023. La presidenta local, aunque centra la labor de oposición al alcalde socialista, parece decantarse más por no ser cartel electoral e ir de número dos. El anterior secretario general, José Vicente García, uno de los militantes más aguerridos del partido, dejó el cargo orgánico y el acta de edil el pasado año por exceso de trabajo, por lo que tampoco cuenta como opción para mayo de 2023.

En su lugar entró,  para cubrir ambos puestos vacantes, Francisco Sabater, procedente de las juventudes populares de NNGG. No obstante, como advierten desde la formación todavía necesita tiempo para curtirse y enfrentarse con alguna opción a un alcalde consolidado como el socialista Juan Antonio Sagredo. En este mar de dudas local aparece con insistencia el ex alcalde del PP Lorenzo Agustí después de años desvinculado. Sobre él pesa una inhabilitación que complica que pueda aspirar a retornar. Tampoco está nada claro que lo aceptara la agrupación local. Y, mientras, emerge la figura de Sergio Moya, un militante activo, con don de gentes, bastante conocido en el vecindario del casco antiguo, que se vio relegado en la candidatura de 2019 a puestos de relleno y últimamente se está prodigando especialmente en actos.

Sagunto y el castillo

En Sagunto el PP tocó fondo en los comicios de 2019 y se quedó con unos exiguos tres ediles: Sergio Muniesa, Davinia Bono y Maribel Sáez. Lejos quedaron los tiempos de la alcaldía de Alfredo Castelló, ahora diputado autonómico y con ascendiente en la agrupación local. El municipio resulta fundamental en la disputa de los diputados provinciales del Camp de Morvedre, además de constituir una alcaldía simbólica por la importancia de la ciudad, agigantada con la pujanza de su parque empresarial, y por el volumen de población. No obstante, el PP no tiene candidato para enfrentarse al socialista Darío Moreno, uno de los alcaldes en crecimiento del PSPV.

Esa precariedad local trata en parte de suplirla la dirección provincial con mensajes como el lanzado recientemente por Mompó. “El Gobierno no ha llegado a ejecutar ni un 3% (2,88%) de la partida destinada para la restauración del castillo de Sagunto. En concreto, el informe de ejecución presupuestaria del capítulo 6 ‘Inversiones Reales’ de los PGE para 2021 confirma que, de los 1.037.220 euros previstos, solo se han ejecutado 29.305 euros”, ha señalado para denunciar la “falta de interés del Gobierno de España con la conservación del patrimonio”.

Las opciones en Gandia

Gandia es, casi a la par que Torrent, la segunda ciudad con más habitantes de la provincia. El portavoz local, Víctor Soler, alcanzó fácilmente la presidencia del partido el pasado año y despunta como candidato a la alcaldía. De cualquier modo, dentro de su propio partido, y en el mismo grupo municipal popular, podrían asomar más aspirantes, como el propio secretario general y también edil Vicent Gregori.

En este caso, al contrario que en Paterna, la dificultad para la dirección del PP estriba en escoger al candidato adecuado de entre las diversas opciones y lograr que el resto lo respalde sin fisuras para aspirar a un reto tan o más complicado que los de Paterna y Sagunt: derrotar al alcalde socialista y asumir la vara de mando.

Mientras tanto, Mompó hace camino allanando la marca a la espera de confirmación de candidato. En la capital de la Safor, por ejemplo, ha asumido la reivindicación histórica del tren Dénia-Gandia exigiéndoselo al Gobierno central.  Como también ha reclamado una mejora del trasporte en el área metropolitana de Valencia, con el PP a la búsqueda de aspirantes a alcalde con posibilidades en ciudades tan pobladas como Mislata, Quart de Poblet o Aldaia, dirigidas por alcaldes socialistas con amplias mayorías. Todo ello lo compagina con su labor de primer edil de Gavarda, la población donde, salvo sorpresa, sí que será realmente cartel electoral en 2023.