MADRID (EP). Moody's ha colocado en perspectiva negativa la nota de 'invesment grade' que tiene asignada a Colonial ante la OPA que la inmobiliaria ha lanzado sobre la socimi Axiare para conformar la primera empresa de edificios de oficinas en renta del país, con activos de 10.000 millones.
La firma achaca esta revisión al hecho de que la operación elevará el ratio de deuda sobre el valor de activos de Colonial por encima de lo que se considera óptimo para el 'rating' de 'Baa2' que tiene concedido a la firma que preside Juan José Brugera.
Se trata no obstante de una revisión habitual que las agencias de calificación realizan a las notas asignadas a las empresas en el momento en que anuncian una operación corporativa hasta el momento en que la cierran. En el caso de la OPA y posterior fusión de Colonial y Axiare, Moody's estima que la operación reforzará la cuota de mercado de la inmobiliaria y su posición en Madrid.
No obstante, estima que elevará el peso del mercado español de Colonial, en detrimento del francés, donde está presente con su filial Société Foncière Lyonnaise, país con mejor 'rating' que el mercado doméstico. Además, la agencia calcula que, tras la transacción, el endeudamiento bruto de Colonial se situará en alrededor del 48% del valor total de sus activos, frente a la tasa del 42% actual.
A pesar de ello, Moody's reconoce que el plan de venta de activos no estratégicos por 300 millones que la inmobiliaria prevé abordar para contribuir a costear la operación puede reducir dicho porcentaje hasta el 47%.
De su lado, S&P asegura que el anuncio de esta fusión no cambia su consideración sobre el perfil crediticio de Colonial. Esta agencia también valora el reforzamiento de la posición de mercado que la operación proporcionará a la inmobiliaria, especialmente en el mercado doméstico, particularmente en Madrid.
"Consideramos que la integración planteada encaja con la estrategia de Colonial, consolidará su presencia en el centro de negocios y financiero de Madrid y, además, extenderá su área de influencia para otras zonas consolidadas del mercado de oficinas de la capital, como es el Campo de las Naciones y los entornos de la M-30 y la A-2", argumenta S&P.