El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. (EP). El delegado de Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha criticado este viernes el voto en contra de la Generalitat al nuevo objetivo de déficit y ha advertido: "El no a todo no nos conduce a nada bueno. Cumplir con el déficit no es un objetivo, es una necesidad".
Moragues ha añadido que la Generalitat no puede "estar permanentemente gastando más de lo que se ingresa" y si bien "hay que garantizar los servicios públicos básicos fundamentales", la administración "debe gestionar sus servicios con eficiencia porque es el dinero del bolsillo los ciudadanos".
"La Generalitat Valenciana debe ser consciente de que está incrementando la deuda en los últimos dos años", ha dicho, al tiempo que ha subrayado que, a pesar del importe de la deuda, que asciende a 44.000 millones de euros, "los intereses que se pagan son mucho menores". De hecho, los ha cifrado en "una cuarta parte" en 2016 de los 1.229 millones de euros abonados en 2014, aunque "no porque se hayan evaporado o desaparecido sino que los está pagando el Gobierno de España", a través de mecanismos extraordinarios como el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
Moragues ha apostado por "seguir una senda de reducción fiscal, reduciendo de forma paulatina el déficit, manteniendo y preservando los servicios públicos en índices de calidad elevados" ya que "con ello lanzamos un mensaje de confianza y credibilidad" y ha advertido de que aumentar el déficit es "detraer el dinero que va a la prestación de servicios públicos".
En esta línea, ha recalcado que la Generalitat ha recibido una "mejora sustancial" de la financiación en los dos últimos años y, como ejemplo, ha dicho que en 2016, "del propio modelo de financiación actual", tuvo "un incremento en caja de más de 1.000 millones de euros a los que hay que sumar los 852 millones más que tendrán este año gracias a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado", sobre los que se ha dicho que se da "la paradoja" de que el PSOE votó en contra pese a que la Comunitat "fue la segunda que más se vio beneficiada del incremento de financiación".
Así, ha insistido en que la Generalitat, en dos años, "ha recibido por caja 1.900 millones más" y tendrá que explicar "qué hace con ese dinero porque las quejas por impagos son generalizados en algunos sectores y, por tanto, deberá justificar donde se invierte ese dinero: en una administración más grande, sobredimensionada e intervencionista, o bien en la prestación de servicios públicos básicos a personas necesitadas y vulnerables, como son menores, dependientes y discapacitados", que son "sus competencias", ha subrayado.
"El presidente de la Generalitat siempre habla de la losa, de la hipoteca y de la deuda pero lo que no dice es la reducción sustancial de los gastos financieros porque los paga el Gobierno de España, que está demostrando el compromiso con esta tierra a través de los instrumentos de liquidez a través de este ingreso por caja, en vena de 1.900 millones, y mediante la reducción de carga financiera", ha criticado.
