VALÈNCIA (EP). La banda valenciana La Fúmiga ha decidido "rescindir los acuerdos contractuales vigentes y no establecer de futuros con festivales donde participa el fondo de inversión KKR".

Esta decisión, según justifica el grupo en un comunicado, responde a su "compromiso de no colaborar con iniciativas que mantengan vínculos con intereses económicos relacionados con el genocidio que sufre el pueblo palestino".

"Este posicionamiento no es nuevo. Desde el inicio del conflicto actual que entendemos como una continuación de una ocupación y vulneración sistemática de derechos humanos con décadas de historia, hemos mantenido una postura clara en defensa de los derechos del pueblo palestino, y la hemos expresado públicamente a nuestros conciertos y espacios de comunicación", recuerda la banda.

"Con este gesto, --prosiguen-- reafirmamos nuestra voluntad de no participar en ningún acontecimiento donde los beneficios puedan contribuir a financiar o legitimar la violencia ejercida sobre Palestina". "STOP GENOCIDI", concluye el comunicado.

La Fúmiga se une así al listado de artistas que han expresado su rechazo a participar en certámenes de Superstruct Entertainment tras la adquisición por parte del fondo KKR. La negativa de grupos a participar en estas citas afecta ya al cartel de encuentros en territorio valenciano, como el FIB, que contaba para esta edición con los catalanes La Élite.

El grupo ha anunciado que no va a tocar "en el FIB ni en ningún festival vinculado a KKR". "Nunca nos ha temblado el pulso ala hora de tomar decisiones y esta vez no será menos. Nunca participaremos activamente en la propagación de un genocidio y menos con nuestra música como moneda de cambio", proclaman.

REACCIONES Diversos festivales han reaccionado ya ante esta situación. Por ejemplo, el Sónar de Barcelona ha asegurado que "se desvincula de cualquier acción" del fondo KKR, y ha expresado su solidaridad con la población civil palestina atrapada en la catástrofe humanitaria de Gaza, así como con todas las personas que sufren las consecuencias de la violencia y la violación de derechos humanos en cualquier parte del mundo.

En sus redes sociales expone que la participación de KKR en el sector de festivales ha suscitado preguntas e inquietudes y recuerda que en 2018 el grupo Superstruct Entertainment adquirió Sónar y que en 2024 este grupo fue comprado por la firma de inversión KKR, entre otros.

"Queremos expresar con total claridad que Sónar se desvincula de cualquier acción de KKR. No tenemos injerencia ni, por supuesto, control alguno sobre sus inversiones o decisiones", afirma la organización.

También el Resurrection Fest ha publicado un comunicado en el que se desvincula totalmente del fondo estadounidense KKR, con intereses proisarelíes y que comparte con la también firma de inversión CVC la propiedad de Supestruct Entertainment, empresa que se encarga de organizar muchos de los principales festivales del país y que se asoció con el certamen de música metal en 2022.

Después de que muchos grupos y artistas hayan expresado su negativa a actuar en citas respaldadas por esta empresa, el festival de Viveiro (Lugo) ha compartido en sus redes sociales un comunicado para "aclarar" las "graves acusaciones" que circulan en los últimos días y que, aseguran, no son "veraces".

El pasado sábado, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, expresó su preocupación por la entrada de KKR en un conjunto de festivales españoles y dejó claro que "no es bienvenido" ni en España ni en su cultura por sus actividades inmobiliarias ilegales en Palestina.