VALÈNCIA. Las obras de la segunda fase del Palau de la Música, anunciadas por el Ayuntamiento de València tras evaluar los cabos sueltos que dejó la gran intervención que lo mantuvo cerrado cuatro años, vuelven a retrasarse. El consistorio anunció ayer que invertirá un total de 340.000 euros en la primera intervención de esta segunda fase: un proyecto dirigido a evitar nuevas inundaciones en el vestíbulo del edificio anexo al principal del Palau. El director del organismo municipal, Vicent Llimerá, prevé que comience a ejecutarse el próximo verano, una vez concluya la actividad de temporada programada en el recinto musical.

Este es el segundo retraso que padece la intervención. Previstas en un primer anuncio para verano de 2024, Llimerá anunció en junio que no se podrían llevar a cabo porque "la tramitación de la licitación obliga a cumplir unos plazos más largos". Como para no paralizar la programación ni molestar a la plantilla que trabaja en el edificio se tienen que desarrollar en periodos de vacaciones, la nueva fecha era diciembre de 2024. También entonces se prometió que se estaban "ultimando los pliegos".

Ayer Llimerá, en una nota oficial remitida a los medios, volvía a ubicar la fase de las obras en un lugar similar, 10 meses despues: “en estos momentos se está redactando el pliego técnico del proyecto y, una vez esté finalizado, se procederá a licitar las obras”. ¿Qué ha pasado entonces? El Ayuntamiento, a preguntas de este diario, ha recordado que la dana paralizó las obras y obligó a reprogramar la intervención de toda la segunda fase. 

Más de una decena de intervenciones y un coste de 6,4 millones de euros: esos son los datos que adelataban la segunda fase y que abarcaban deficiencias como filtraciones, entradas de agua y mejoras pendientes. La primera previsión fue que extenderían hasta 2026, aunque la mayoría de obras se ejecutarían a lo largo de 2025. Estos plazos ya no se van cumplir.

Primera intervención

Las obras previstas para este verano fueron aprobadas el pasado mes de octubre y consisten en una actuación en el forjado del espacio sobre el que se asienta el vestíbulo. Tal como recoge el plan de las obras, se prevé extraer el forjado existente y construir uno nuevo 30 centímetros más abajo, lo que permitirá disponer de un depósito subterráneo al que se podrá derivar el agua de las lluvias de manera que no se estanque y provoque inundación. Dicho depósito estará conectado directamente con el colector principal, lo que permitirá la evacuación hídrica. A esta primera intervención se le sumarán diferentes actuaciones complementarias que se desarrollarán posteriormente.

Vicent Llimerá ha explicado que “está previsto que las obras empiecen, si no hay ningún imprevisto, durante el mes de julio, una vez concluya la actividad del Palau”. El montante total sumará 390.000 euros, dado que a los 340.000 euros del proyecto de prevención de las inundaciones se sumarán otros 50.000 euros para las inversiones complementarias de mejora a desarrollar posteriormente en el recinto musical.