VALÈNCIA. Tras la estela del Taycan y con el futuro Cayenne Electric en el horizonte, el Porsche Macan se consolida en el mercado como el SUV compacto para todo. Deportivo como ningún otro rival, práctico y confortable, con una batería de gran capacidad y con una tecnología de carga perfecta para viajes largos, es el modelo más completo de su segmento.
El tiempo avanza de forma inexorable. Es, de hecho, una de las pocas cosas que escapan a la influencia del hombre. Sin embargo, sí es posible crear obras que trasciendan a toda época. Piezas que van más allá de la temporalidad. Buen conocedor de esta realidad, Ferry Porsche fabricó el coche de sus sueños en 1948 tras mirar a su alrededor y ver que no existía ningún vehículo deportivo capaz de satisfacer sus gustos.
Aquel 356 “Nº 1” Roadster dio origen a la marca tal y como se conoce hoy y sentó las bases del coche perfecto. A partir de ahí, se fue aplicando la misma filosofía a cada Porsche que iba llegando al mercado. Así, modelos como el 911, el 928, el Boxster, el Carrera GT, el Cayenne, el Taycan o el Macan, por citar algunos de los más relevantes, se han mirado en el espejo de ese primer 356 que se construyó de forma artesanal en los talleres de Gmünd, en Austria.
Partiendo de esta premisa, el Macan nace en 2014 como el SUV compacto para todo. Es un éxito rotundo desde el inicio, un modelo de gran volumen dentro de la marca, que consigue captar la atención de los clientes en todo el mundo. Con la satisfacción del deber cumplido y tras más de 800.000 unidades vendidas a lo largo de una década, la primera generación se despide en 2024, dando paso a la segunda, que llega al mercado totalmente enfocada en la movilidad del presente. Ahora, en solo unos meses, ya se ha logrado superar el millón de unidades del Macan entregadas en poco más de diez años.
El nuevo Macan sigue siendo muy deportivo y portador del inconfundible ADN de la marca. Es dinámico y capaz en cualquier superficie; también es práctico, elegante, tecnológico y personalizable. Pero ahora añade un nuevo rasgo distintivo que cambia las reglas del juego: es 100 % eléctrico.
El Macan Electric sigue los pasos del Taycan, el primer deportivo 100 % eléctrico de la marca. Llega en el momento adecuado, con Porsche liderando la electromovilidad gracias a una oferta sólida de producto y una fuerte implicación en el crecimiento de la infraestructura de nuestro mercado. “Porsche es un actor fundamental, que empuja la movilidad sostenible con la instalación de puntos de carga en sus Centros Porsche y también mediante la firma de acuerdos con otras compañías como bp pulse/Iberdrola, Zunder o la joint venture Ionity”, declara Tomás Villén, Director General de Porsche Ibérica, quien también subraya que “ya es habitual conducir un vehículo eléctrico disfrutando del viaje. El potencial de crecimiento es grande, lo que invita a pensar que el escenario es cada vez mejor”.
Un auténtico Porsche en la era de la nueva movilidad

- -
En el apartado tecnológico, el SUV compacto también destaca por los múltiples asistentes a la conducción que incorpora y por otros elementos como el chasis con dirección en el eje trasero y los amortiguadores de dos válvulas, que son novedad en la gama Macan y ayudan a ofrecer una dinámica sobresaliente. En el interior, el protagonista es el Porsche Driver Experience con nuevo sistema operativo, que consta de tres pantallas: una independiente y curva de 12,6 pulgadas para la instrumentación, otra central de 10,9 pulgadas y otra de idénticas dimensiones para el pasajero. El head-up display con realidad aumentada completa la experiencia tecnológica en el habitáculo del SUV.
El objetivo inicial con el Macan Electric, en palabras de Jörg Kerner, Vicepresidente de la Gama Macan, era “ofrecer el coche más deportivo de su segmento”. No solo ha alcanzado esta meta, sino que se ha convertido en el modelo más completo entre sus competidores. Y, lo que es más importante, sin renunciar a sus raíces a pesar de contar con todas las exigencias de la nueva movilidad: el nuevo Macan parece un Porsche, se siente y conduce como un Porsche, y es único y exclusivo como un Porsche.
“El Macan Electric está teniendo un impacto muy positivo para Porsche Ibérica”, señala Tomás Villén. “No solo hemos superado las ventas del modelo de combustión sino que también captamos nuevos clientes que no teníamos en la marca, lo que agranda nuestra comunidad y la hace aún más sólida”. A fecha de hoy, casi el 40 % de los Porsche que se venden en España y Portugal son 100 % eléctricos, en torno al 80 % están electrificados y el restante veintitantos por ciento son de gasolina. Porsche sigue apostando por los tres sistemas de propulsión, combustión, híbrido y eléctrico, una estrategia acertada en palabras de Villén: “Como dice nuestro Presidente, Oliver Blume, ‘los números siempre dicen la verdad’ y no puedo estar más de acuerdo”.