MADRID (EP). Ores, la socimi propiedad de Bankinter, se ha lanzado a la compra de varios locales comerciales en el norte de España, ampliando así su negocio de activos inmobiliarios. Esta diversificación puede ayudar al crecimiento de la entidad que, además, está llevando a cabo interesantes iniciativas en otros ámbitos. Así mismo, parece que Bankinter se encuentra alejada de las tensiones geopolíticas ya que es de las entidades españolas que menor exposición tienen en Cataluña.

A nivel técnico, tras sufrir un efecto contagio, las acciones de Bankinter no han podido consolidar el retroceso 23,6 de Fibonacci del último impulso alcista, coincidente con los 7,95 euros por acción y que se está convirtiendo en una importante zona de resistencia. Sin embargo, los títulos han frenado su caída en torno a los 7,65. Este precio, correspondiente a los máximos de finales de 2016 y a los últimos mínimos, debería actuar como freno ante posibles caídas.

En este escenario, sería posible pensar en un rebote del valor intentando recuperar los 7,95 euros. Llegado este precio deberíamos esperar a su consolidación antes de pensar en un posible ataque nuevamente a los 8,50 euros que, no obstante, podría producirse en las próximas semanas en caso de disiparse las dudas que inquietan a los inversores. El RSI, muy cercano a niveles de sobreventa, hace pensar también en este rebote a corto plazo. 

El retroceso 38,2 debería actuar como soporte en caso  que las acciones de Bankinter no consigan recuperarse desde precios actuales. En este sentido, los inversores deberían vigilar la zona de 7,48 euros por acción ya que, en caso de romperla, las perspectivas para la entidad podrían cambiar a una perspectiva negativa. 

Sergio Puente es analista de XTB