VALENCIA. A Rita Barberá no le gustaban los cambios. Esta máxima se desprende de cómo la histórica alcaldesa de Valencia manejó con parsimonia los relevos en las candidaturas del PP al Cap i Casal: pocas variaciones se incluían cuando llegaba la hora de confeccionar las listas al consistorio en los sucesivos compromisos ante las urnas.
Así, Barberá era partidaria de mantener los equipos y referentes en cada cita electoral. No en vano, atendiendo a la candidatura de 2007, ocho de los diez actuales concejales imputados del PP en el Ayuntamiento de Valencia ya fueron ediles tras los comicios locales del citado año. Una campaña que, tal y como ha desvelado este diario, se encuentra investigada al sumar un coste 20 veces superior a lo que fue declarado en su momento.
De esta manera, atendiendo a ambas candidaturas, se aprecian grandes coincidencias aparte de que en las dos fue Rita Barberá la cabeza de lista. Ocho de los diez actuales concejales en el Ayuntamiento de Valencia bajo las siglas del PP ya fueron ediles en el 2007. Los ocho se encuentran imputados por el presunto blanqueo de capitales derivado de la Operación Taula.
Aunque ahora suspendidos cautelarmente de militancia por encontrarse investigados citado caso, formaron parte del equipo de la alcaldesa Alfonso Novo (de 2 en 2015, de 11 en 2007), Beatriz Simón (de 3 en 2015, de 17 en 2007), Vicente Igual (de 5 en 2015, de 8 en 2007), Maria Àngels Ramon-Llin (de 6 en 2015, de 15 en 2007), Cristóbal Grau (de 7 en 2015, de 18 en 2007), Félix Crespo (de 8 en 2015, de 14 en 2007), Lourdes Bernal (de 9 en 2015, de 20 en 2007) y María Jesús Puchalt (de 11 en 2015, de 9 en 2007).
En este sentido, cabe recordar que entre los nombres ilustres que figuraban en la lista de 2007 se encontraba Alfonso Grau como número dos de la candidatura, la mano derecha de Barberá a la que se le atribuye según los documentos a los que ha tenido acceso Valencia Plaza el contrato con la empresa Laterne, además de su ahora pareja y entonces personas de confianza de la alcaldesa de Valencia, María José Alcón, quien figuró en un puesto retrasado de la candidatura en 2015 apartándose poco antes de los comicios a tenor de las informaciones publicadas sobre su posible implicación en la Operación Taula.
Por otro lado, la campaña de 2007 investigada tras la documentación aportada por este diario ofreció un grandísimo resultado para el PP -el mejor de su historia- con un 56% de los votos y el balance de 21 concejales. Una cifra sensiblemente superior a la lograda en el 2015, donde la formación popular cayó hasta los 10 ediles, con la pérdida de la mayoría absoluta y la vara de mando. La marcha de Rita Barberá al Senado permitió la entrada de María Jesús Puchalt, quien además fue designada diputada provincial.
El destino de otros ediles de aquella lista de 2007 no se situó fuera de la política. Así, Miquel Domínguez es actualmente diputado en Les Corts, aunque fuera del grupo popular precisamente por su imputación en el caso del presunto blanqueo de capitales. También en la cámara autonómica se encuentra Jorge Bellver, edil en aquel mandato y coordinador de campaña en aquella cita con las urnas, quien no obstante no se encuentra investigado dado que abandonó el consistorio la pasada legislatura y no estuvo implicado en las donaciones de mil euros. Además, Marta Torrado pasó a la disciplina del Congreso posteriormente hasta recalar en la siguiente convocatoria electoral en la candidatura del Senado.